Falleció la bebita que se atragantó en una guardería

  • Negligencia en la estancia Sol y Luna de Cancún
  • Directora y personal alcanzan caución, pese a la gravedad del caso

 

El diagnóstico final fue muerte cerebral de la bebita por falta de aire debido a que no se le aplicaron los primero auxilios desde la guardería Sol y Luna.

El diagnóstico final fue muerte cerebral de la bebita por falta de aire debido a que no se le aplicaron los primero auxilios desde la guardería Sol y Luna.

 

Cancún.- Falleció la bebé JGSA que se atragantó en la guardería Sol y Luna y desde el punto de vista de los padres no ofrece garantías de justicia por quedar impune, ya que los presuntos implicados pueden alcanzar fianza por el delito de homicidio imprudencial.

Reyna Alejandra Alonso Sulub, madre de la niña, de 25 años, originaria de Mérida, Yucatán, clamó justicia, pues luego de  luchar por su vida a pesar de tener muerte cerebral, descansó al detenerse su corazón.

Con lágrimas asomándose en los ojos, la madre indicó que a pesar de su gran dolor se mantuvo en pie para clamar justicia, ya que no podía derrumbarse en tanto su hija luchaba por su vida al estar su pequeño cuerpecito conectada en diferentes máquinas que la ayudaban a respirar.

Apoyada por su familia, esposo y el abogado defensor Roberto Arjona, se presentó de forma inicial la querella por el delito de lesiones, contra quien resulte responsable en la guardería Sol y Luna, cuyo personal enfrenta demanda por el delito de homicidio imprudencial por la asfixia de la niña. De acuerdo a los familiares, alrededor de las 14:00 horas de ayer les informaron a los afligidos padres que la menor había fallecido.

Fue el personal médico del Instituto Mexicano del Seguro Social, ubicado en la  avenida Kabah con López Portillo, el encargado de transmitir la noticia.

Los hechos

El pasado miércoles Reyna Alejandra Alonso Sulub informó que su hija estaba en las instalaciones de una guardería, ubicada en la supermanzana 60 denominada Sol y Luna, cuando la dueña María Sebastián Pérez llamó para avisarle que su hija se encontraba inconsciente porque al desayunar estornudó y se le atoró un trozo de plátano en la garganta, y le pidió a la madre permiso para trasladar a la infante en su vehículo personal, ya que la ambulancia no llegaba.

Mencionó que los médicos tardaron 17 minutos para que la niña recuperara el pulso, sin embargo, el diagnóstico final fue muerte cerebral, por falta de aire, debido a que no se le aplicaron los primero auxilios.

Luego de 14 días de ver a su hija en el hospital donde ingresó de urgencia, la madre recibió la noticia de la muerte de su bebé, hecho que en su oportunidad calificó como grave y doloroso para cualquier madre por lo que apeló a que ninguna madre pase por alto el lugar en donde deja sus hijos y se ocupe de verificar que no sólo cuenta con los permisos, sino que también tienen personal calificado para atenderlos en caso de emergencia.

 

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