• Incosteable operar en las mismas condiciones de hace un año

Los concesionarios del transporte público en Cancún consideran que la nueva fijación de tarifas no es asunto político, sino económico, tan simple como la ley de la oferta y la demanda.

Cancún.- Se rebelan los transportistas ante la “tibieza” del cabildo de Benito Juárez, al asumir como un problema político el alza de un peso a la tarifa del transporte urbano y dejar de lado el alto costo de operación de las empresas Turicún, Autocar, Maya Caribe y Bonfil que esta semana plantearán de manera formal dicha petición.

Los transportistas que esperan una respuesta en no más de 45 días luego de la petición oficial de la revisión de su propuesta, confiaron en que ya no se evadirá más dicha solicitud, ya que es prácticamente incosteable operar en las mismas condiciones por el constante alza del combustible e insumos, precio de las refacciones de importación.

El director de Turicún, Vicente Noya reiteró que el alza de un peso a la tarifa del transporte urbano es la petición que plantearán de nueva cuenta a las autoridades y cabildo, tal como se efectuó desde la pasada administración.

“La resistencia a la revisión es porque es un tema político, pero bueno no es culpa nuestra necesitamos actualizarnos”, precisó Vicente Noya quien sentenció que de hacer caso omiso las autoridades, una de las consecuencias es que los camiones se seguirán “avegentanto”.

Respecto a las refacciones de importación, mencionó que estas se cotizan en dólares, situación que hace difícil su mantenimiento ya que el compromiso es operar con vehículos en buen estado.