• La banda española de pop, en definitiva “rockea” más que muchos que dicen hacer rock

Arturo Arellano

La Oreja de Van Gogh emocionó a sus fans mexicanos.

La noche del jueves, el Auditorio Nacional de la ciudad de México se llenó de rosas, cuando recibió en su escenario a La Oreja de Van Gogh, agrupación española de pop que convocó un recinto lleno, interpretando cada uno de sus éxitos en la voz de una entregada Leire Martínez, quien en compañía de Pablo Benegas, Haritz Garde, Álvaro Fuentes y Xabi San Martín, destrozaron románticamente el lugar.

El concierto dio inicio minutos después de las 20:30 horas, en el momento en que la banda entro para interpretar “Rosas”, acompañados únicamente de sus instrumentos, mientras se hacían rodear de una estructura metálica y un sencillo juego de luces, pero no hacía falta más para hacer de esta una velada inolvidable.

Seguido de este tema los “poperos” ejecutaron “El ultimo vals”, mismo que sirvió para levantar a todos sus fans de sus asientos y corear cada verso junto a la cantante, por lo que al terminar la canción ella dijo “México, muchísimas gracias, esto es una maravilla, que gran cantidad de sentimientos, ni como explicarlos, creo que la mejor manera será hacerlo con una canción”, y así lo hizo cantando “Cuando dices adiós”, “Promesas de primavera” y “20 de enero”.

Acto seguido platicó que México ha sido un país fundamental en la existencia de la banda. “El disco primera fila que recién estrenamos, es el primero en toda nuestra historia que no se graba en su totalidad en España, sino en México, este país que tanto nos ha dado y que tanto nos representa, creo que la siguiente canción es la mejor manera de explicarlo”, señaló para dar paso a “Una y otra vez”, así como después a “Vestido azul”, “Perdida” y “París”, esta última de las más cantadas de la noche.

Posteriormente, La Oreja de Van Gogh se enfiló hacia un ambiente si bien romántico por sus letras, también muy explosivo y pasional por la manera de ejecutar cada canción, demostrando por ejemplo en el tema “Europa VII” su versatilidad y talento, incluyendo un solo de theremin de parte de Xabi San Martín, instrumento que por extraño que parezca no se toca, sino que emite su sonido con solo la proximidad de las manos a la antena del mismo.

Ya con la gente completamente metida en el show, Leire dio inicio al tema “La playa”, que sin duda era uno de los más esperados, pero lo que el público no sabía era que aparecerían las hermanas Hanna y Ashlee, quienes conforman el dueto Ha-Ash, en el escenario para acompañar a la banda con el tema, consiguiendo así la euforia total de todos los presentes.

No obstante el momento más interesante de la noche se tornó cuando llegó el turno de “Jueves”, tema que fue interpretado únicamente por voz y piano, logrando que los asistentes iluminaran por completo el recinto con las luces de sus celulares, sacando así lágrimas de emoción de una Leire que parecía no creer lo que sus ojos miraban, un recinto abarrotado con fans que corean cada palabra salida de su boca.

Luego la banda se despediría con “Muñeca de trapo”, “El primer día de mi vida”, “Pálida luna”, “Cometas en el cielo” y “Pop”, realizando una salida en falso, para volver y terminar el show con “La niña que llora en tus fiestas” y “Puedes contar conmigo”, éxitos con los que demuestran que a pesar de ser una banda de pop, son capaces de “rockear” y despertar emociones tan intensas aun más grandes y mejores que muchos que dicen hacer rock.