El responsable de intoxicación masiva podría quedar libre

  • Sólo sería acusado de negligencia
Emilio Carrasco Hernández

 

Los inspectores de la Secretaría de Salud han iniciado una cacería en contra de los expendios y locales de carnes asadas en la vía pública para evitar enfermedades por consumir alimentos descompuestos.

Los inspectores de la Secretaría de Salud han iniciado una cacería en contra de los expendios y locales de carnes asadas en la vía pública para evitar enfermedades por consumir alimentos descompuestos.

Chetumal.– La Procuraduría General de Justicia en Quintana Roo dio a conocer que se inició una investigación por la muerte de un niño por el envenenamiento causado por alimentos descompuestos, hecho ocurrido el lunes después de haber comido pollo descompuesto en el municipio de Bacalar.

El director de Justicia Penal, Julio César Duarte Herrera, dijo que el delito podría englobarse en el fallecimiento del menor por ingerir pollo en mal estado y es simplemente una negligencia, por lo que el responsable del hecho pudiera obtener su libertad bajo fianza, al no ser considerado un delito grave.

Las investigaciones se encaminan al proveedor de los pollos y se inspeccionan otros locales semifijos que los venden asados al carbón no sólo del municipio de Bacalar, sino de Chetumal, donde existen cientos de establecimientos que se dedican a vender los alimentos al aire libre.

Por lo pronto, se llevan a cabo las primeras pesquisas para deslindar responsabilidades en el caso del menor que falleció y las 11 personas adultas que resultaron intoxicadas, por parte de la Procuraduría General de Justicia de Quintana Roo.

 

Megamulta y clausura a negocio que vendía pollo en mal estado

 

El dueño del expendio denominado “Asadero El Pollo” del municipio de Bacalar, donde vendieron producto en mal estado que provocó la muerte de un menor de dos años y la intoxicación de 11 personas del mismo poblado, podría hacerse acreedor a una multa entre 500 y 5 mil salarios mínimos.

Por lo pronto, se procedió a su clausura y se aplicaron inspecciones a diversas rosticerías en Bacalar, para descartar la presencia de pollo contaminado en este municipio.

En el expendio denominado “Asadero El Pollo” se inició un procedimiento de revisión tomando muestras de los alimentos y del agua que ahí se usa, para enviarlas al laboratorio de la Secretaría Estatal de Salud.

La Sesa confirmó que dependiendo de los resultados, el dueño del local de donde salió la carne contaminada se haría acreedor a una multa de los 500 a los 5 mil salarios mínimos e incluso el “Asadero El Pollo” podría ser clausurado definitivamente.

 

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