- Año muy difícil para México
José Luis Montañez
Enrique Peña Nieto dio un mensaje a la nación con motivo de su Tercer Informe de Gobierno desde en el patio central de Palacio Nacional.
El presidente Enrique Peña Nieto manifestó que evaluar las acciones realizadas en la primera mitad de su gobierno le permitió reflexionar sobre lo que le molesta, perturba y preocupa a la sociedad, pues el último año ha sido muy difícil para México, “profundamente lastimado por casos y sucesos lamentables”.
Dijo que hechos como la desaparición de estudiantes normalistas en Iguala, Guerrero, y la fuga del narcotraficante Joaquín Guzmán Loera, “nos recuerdan situaciones de violencia, crimen y debilidad del estado de Derecho”, así como casos de conflictos de interés y denuncias de corrupción.
Reconoció que estos hechos generaron molestia e indignación de la sociedad, lastimaron el ánimo de los mexicanos y la confianza ciudadana en las instituciones, a lo que se sumó una preocupación por la situación actual de la economía.
Precisó que en los próximos años se va a continuar con el combate a la corrupción, en conjunto con las instituciones.
Además, señaló que la baja del precio del petróleo y el alza en el precio del dólar responden a fenómenos del exterior que pueden afectar la economía nacional, lo que origina “desconfianza en lo interno e incertidumbre en lo externo”.
Sin embargo, subrayó que estos desafíos, se enfrentarán “con determinación, hacia adelante, comprometidos con la ley, la justicia, los derechos humanos”, y procurando la integridad del servicio público, mediante la transformación de las instituciones para tener una mejor transparencia y combate a la corrupción.
“México seguirá distinguiéndose por su disciplina en las finanzas públicas” y se continuará con la implementación de las reformas transformadoras, para “mostrarle al mundo que somos un país confiable, en el que se puede creer y crecer, en el que se pueden incrementar las inversiones y mejorar la economía”.
Peña Nieto señaló que al inicio de su administración, la nación estaba inmersa en un entorno de agravios y polarización, y mantenía “15 años de parálisis legislativa”, y que a pesar de ser una economía abierta, el país estaba por debajo de su potencial, por diversos obstáculos que impedían el avance nacional.
Reconoció que existe frustración, enojo y pesimismo entre personas de todos los continentes, las redes sociales reflejan esos sentimientos pero los cambios positivos y duraderos se logran con responsabilidad, por ello “mi responsabilidad es seguir transformando sin excluir”.
Alertó que ante el afán de hallar respuestas rápidas a sus exigencias, la sociedad opte por salidas falsas que hagan creer que la intolerancia, la demagogia y el populismo son verdaderas soluciones.
“Esto no es nuevo. Es una amenaza recurrente que ha acechado a las naciones en el pasado, dijo durante su mensaje a la nación con motivo de su Tercer Informe de Gobierno, emitido en el patio central de Palacio Nacional.
“Hay ejemplos en la historia, en donde los sentimientos de inconformidad tras crisis económicas globales, facilitaron el surgimiento de doctrinas contrarias a la tolerancia y a los derechos humanos”, expuso ante miembros de su gabinete, representantes de los poderes Legislativo y Judicial, gobernadores e integrantes de organizaciones de la sociedad civil.
