- Por crisis a consecuencia del Covid-19 en México
Crisis por Covid-19 podría generar hasta 16 millones de personas adicionales en situación de pobreza en el país.
Ciudad de México.- La crisis económica a consecuencia de Covid-19 podría generar hasta 16 millones de personas adicionales en situación de pobreza por ingresos, estimó BBVA Research en una situación muy drástica, o sea, una caída de la actividad económica de 12%.
Un estudio realizado por la firma señala que si, en el mejor de los casos, la economía mexicana cae 7% este año, la población en situación de pobreza por ingresos llegaría a 58.4%, equivalente a 12 millones de personas adicionales.
En dicho escenario, BBVA Research calcula que 26.6% de la población en el país estaría en situación de pobreza extrema, esto es, alrededor de 12.3 millones más de personas.
En su estimación más drástica, con una caída de la actividad económica en México de 12% esto llevaría a un aumento de 16.4 millones de personas adicionales en situación de pobreza por ingresos.
En dicho cálculo, BBVA espera un incremento de 18 millones de personas adicionales en condición de pobreza extrema por ingresos, esto es, 31.2% de los mexicanos.
BBVA Research recordó que el pasado 11 de mayo el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) publicó el estudio “La política social en el contexto de la pandemia por el virus SARS-CoV2 (Covid-19) en México”, el cual analiza los posibles efectos de la actual crisis por Covid-19 en diversas variables y dimensiones relacionadas con la pobreza en México, y hace un diagnóstico de los programas y acciones de desarrollo social del gobierno federal que se consideran prioritarios para continuar operando durante la emergencia sanitaria.
En ese sentido, BBVA Research explica que las estimaciones del impacto del Covid-19 en la pobreza en México se hacen bajo un modelo más conservador de la caída que podría tener la economía mexicana en 2020.
“Estos modelos presentados por el Coneval se basan en un estimado conservador de una reducción de 5% en el ingreso per cápita, considerando que, en 2009, cuando se presentó la recesión financiera global, el PIB de México se contrajo 5.3%.
