Reír… Llorar… Sentir…

Gloria Carpio

 

• La doctora en salud mental asegura que la mujer en México es la principal educadora, pero la menos preparada en temas de salud mental. Esta lectura es esencial para dar un paso hacia la reparación de los daños de la peste del abuso y la violencia.
• La agresión ejercida por nosotras no es el camino. La psicoeducación sí nos abre una puerta al amor y las relaciones humanas saludables”, indica la escritora

 

 

 

“Hoy estoy viva porque mi padre tenía mala puntería…”. Cuando la doctora en salud mental y psicoterapeuta Ana Goffin tenía tres años de edad, su padre tenía en las manos una escopeta con la que le estaba apuntando a su mamá y cuando disparó, la bala pasó en medio de Ana Goffin (siendo prácticamente una bebé) y de su madre. Algunas de las personas que han leído el libro no pueden creer que haya vivido una situación así. La violencia hacia la mujer se da en todas las culturas sin importar a qué estrato socioeconómico pertenezca”, señala en entrevista con DIARIOIMAGEN, la doctor Ana Goffin, quien actualmente promueve su libro “En la boca del cocodrilo”, en el que narra diversas historias de violencia contra la mujer, mismas que fueron enviadas a la autora de las protagonistas y que ella plasmó en el libro de manera anónima.

Durante esta pandemia que estamos viviendo la violencia intrafamiliar está completamente desbordada, ha aumentado un 60 por ciento, por lo que la doctora Ana Goffin promueve su séptimo libro “En la boca del cocodrilo”.

“El libro ‘En la boca del cocodrilo’ (publicación binacional de Libros del Marqués en México y Fig Factor Media en Estados Unidos), se gesta por un recuerdo de mi infancia, de un episodio de violencia entre mis papás, la realidad no sabía si era un recuerdo creado por mi imaginación de niña o era verdad, pero cuando platiqué con mi mamá me contó su historia y efectivamente fue un episodio de violencia real cuando yo tenía 3 años de edad, en ese momento dije no me puedo quedar callada porque en el linaje femenino es básico abrir todos los secretos, todos estos temas para que las siguientes mujeres ya no repitan el mismo patrón.

Teniendo la historia de mi mamá y su autorización para publicarla y ayudar a otras mujeres, pedí historias de mujeres que hayan sido víctimas de violencia, y me llegaron historias de España, Costa Rica, Puerto Rico, Estados Unidos, Chicago, estaba sorprendida porque me llegaron más de 40 cartas de mujeres de todo el mundo”.

De ese episodio que desafortunadamente vivió la doctora Ana Goffin y que afortunadamente está viva, ella descubrió el por qué sus miedos a ciertos ruidos, a la velocidad y que seguramente esto la llevó a ser maestra en salud mental, psicoterapeuta, escritora de varios libros y Speaker internacional.

EL CEREBRO TRIÚNICO

“ El problema de la violencia hacia la mujer es un problema que vivimos las mujeres alrededor del mundo y no se va a solucionar con más violencia, por ello se me ocurrió bautizar a mi libro con el título ‘En la boca del cocodrilo’ y no es porque estemos dentro de la boca del cocodrilo, sino que es una metáfora que uso para abordar el tema desde el cerebro triúnico en el que invito a las mujeres a psicoeducarse y aprender a usar su cerebro como si fuera una orquesta el cerebro límbico que es el de los sentimientos, el cerebro racional y el reptiliano es el del cocodrilo que es el que nos ayuda a huir cuando estamos en una situación de peligro, pero también es el que ataca y el que nos congela y ese cerebro si no está conectado con los demás lo único que va a generar es más de lo mismo.

El libro “En la boca del cocodrilo” está por adquirirse de manera digital, pero físicamente lo pueden obtener en librerías Gandhi online y en Amazon llega a cualquier parte del mundo. El libro cuesta alrededor de 250 pesos.

Ana Goffin de nacionalidad belga mexicana, es además conferencista y psicoterapeuta. Cuenta con dos Doctorados Honoris Causa, uno por el Claustro Doctoral Iberoamericano y otro por el Claustro Doctoral Honoris Causa en la UNAM.

HAY QUE EDUCAR EN CASA

Ana Goffin asegura la mujer en México es la principal educadora, pero la menos preparada en temas de salud mental. Esta lectura es esencial para dar un paso hacia la reparación de los daños de la peste del abuso y la violencia.

“En las parejas jóvenes veo más involucrados a los hombres en la educación de los hijos, pero realmente recae más el peso sobre la mujer, por ello la opción que estoy dando es dejemos de ser violentas, dejemos de agredir, dejemos de estar satanizando al hombre , vamos a educar desde casa y vamos a empezar desde el lugar en donde se originan esos problemas porque la mayoría de las veces el abuso sexual viene de algún familiar. La mayoría de las veces la violencia es ejercida por alguien que vive en casa, por ello hay que educar en casa.

—¿Cuántos testimonios se cuentan en el libro “En la boca del cocodrilo”, además del tuyo?

Alrededor de 20, todas las historias son importantes, pero cada historia tiene la parte psicoeducativa que es la enseñanza que nos deja cada una de las historias de todas las mujeres valientes que son sobrevivientes de abuso sexual, de violencia y en la parte teórica de qué hacer cuando pasas una situación así y lo impactante del libro es que nada es inventado por mí, todas son historias vividas por mujeres.

“CUANDO HAY VIOLENCIA Y CUANDO TE ESTÁN
LASTIMANDO ES NECESARIO PEDIR AYUDA”

—Nos cuentas una historia que narres en tu libro.

Cuento una historia muy fuerte para que tomen la responsabilidad y se atrevan a leer y aprender sobre el tema. Recibí una carta de la prima de la protagonista de la historia, se trata de una mujer que conoce en la oficina a su novio, se enamora de él y muy pronto le da un anillo, se casan y al poco tiempo empieza a ver detalles de violencia de parte de él en la luna de miel, le pide que no use un bikini, luego el mesero le tira una copa encima y reacciona muy violento con el mesero y a partir de ese día empiezan a comer en el cuarto porque en ese hotel “mugroso” lo están atendiendo mal. Cuando ella regresa de su luna de miel, él pierde su trabajo, empieza a golpearla y a partir de ahí las golpizas no terminan hasta que la mata.

Esto no es un juego, cuando hay violencia y cuando te están lastimando es necesario pedir ayuda, ahora hay muchas instancias a las que podemos recurrir y en mis manos no está cambiar al gobierno o tomar medidas en la política para ayudar a las mujeres, pero podemos empezar a hacer grupos de apoyo para nosotras mismas para salir de ahí.

—Hay alguna historia de una mujer que haya sido víctima de otro familiar que no sea precisamente el cónyuge.

Hay una historia de una víctima del abuelo, hay muchas historias como el caso de una chica que sale con sus amigos en la noche, beben alcohol, su mejor amigo la lleva a su casa y en el coche la abusa sexualmente y ella lo sigue viendo en la escuela y dice ‘es que yo también bebí alcohol, entonces ¿de quién es la responsabilidad, de él o mía?”, y ahí entramos en dilemas que son importantes atender.

—Por qué algunas mujeres cuando se separan de su agresor lo perdonan y regresan?

Porque comienza la etapa de la reconquista, les dan flores, chocolates, las invitan de viaje, las vuelven a convencer y desgraciadamente muchas mujeres caen porque se vuelven adictas a esa adrenalina de esa reconquista de parte del hombre porque desean esa luna de miel, porque lo que quieren es ganar y conquistar una vez más, pero la violencia empieza muy pronto ya que el hombre logró otra vez conquistar a la mujer. Pero al paso del tiempo, nuevamente empieza el agresor con pequeños brotes de enojo hasta que vuelve a empezar la violencia y el abuso, vuelve a explotar la situación, se vuelven a separar y empieza otra vez el mismo ciclo.

“ERES UNA BRUJA O UNA HISTÉRICA”

—¿Tratar de educar a los hijos con golpes es un error y una violencia?

Gritar y pegarle a un niño no es nada sano porque le estás enseñando a reaccionar desde el cerebro reptiliano, es decir de “cuando te ataquen, ataca”. A los niños hay que conectarlos con su inteligencia emocional para que cuando tenga un problema pongan límites claros, flexibles, pero bien definidos que puedan mostrarle por dónde sí puede ir y por dónde no. Si a un niño le pegan lo único que va a entender es que lo están lastimando, no va a comprender la razón de la conducta de sus papás y en efecto tampoco va a saber de dónde viene. Si a un niño se le pega su reacción va a ser lastimar, ni siquiera piensa en sus emociones.

—¿Actualmente das terapias psicológicas?

En este momento no estoy dando terapias porque me estoy dedicando a dar cursos. Estoy lanzando mi primer curso online sobre problemas de pareja que se llama “Eres una bruja o una histérica”, pero si me escriben a mis redes sociales los puedo canalizar con experto a bajo costo.

Mi curso “Eres una bruja o una histérica” es ideal para las parejas en muchos sentidos y es sumamente económico, cuyos informes pueden consultar en mi página web www.anagoffin.com

—¿Qué pasa cuando la mujer agrede y violenta al hombre?

Es curioso, para mí libro “En la boca del cocdorilo” no recibí cartas de hombres, pero sí hablo de algunos fragmentos de cartas que no incluí completas, pero son cartas que en cuanto se leen sus fragmentos, uno se da cuenta que quien está propiciando la violencia es la mujer, por supuesto que hay mujeres violentas.

El cerebro cocodrilo está en hombres y mujeres, pero qué pasa con los hombres , que al haber más testosterona está más conectado con el cerebro reptiliano que las mujeres, sin embargo nos congelamos igual, aunque no tengamos testosterona y ellos responden agresivamente, pero la agresión es una parte natural del ser humano y no es mala, lo que es inadecuado es la manera en que la expresamos.

—La violencia hacia la mujer va en aumento

Va en aumento y no distingue estrato socioeconómico, eso es bien importante señalar, porque muchas veces se cree que solamente se da en zonas marginadas con mujeres que han tenido poco acceso a la educación y no es así, se da en todos los estratos sociales, aunque sí tiende a existir más violencia en lugares en los que hay más carencias porque cuando los jóvenes no estudian y no trabajan se involucran muy fácilmente en vivir en la fiesta, las drogas o el alcohol y ahí entra un factor muy importante, que la mayoría son jóvenes que no estudian y no trabajan, empiezan a ser violentos.

LA IMPORTANCIA DE LA PSICOEDUCACIÓN

—Menciona la importancia de la psicoeducación en nuestras vidas.

Es muy importa la psicoeducación y entender para qué son nuestras emociones, conocer más sobre las adicciones, la codependencia, el Síndrome de Estocolmo doméstico, todos estos temas vienen en el libro, vienen explicados en especial para que las mujeres empiecen a educar desde el lugar en el que estén no nada más en la familia, también los profesores, todos debemos estar educados en este tema, es un tema de salud mental.

—No se estudia para ser padre o madre…

Pero sí se estudia para conocerse a uno mismo, tomar cursos sobre la conducta humana, es como una maestría en uno mismo que va a ayudar a tener mejores relaciones con los demás y con uno mismo, es abrir la puerta de la conciencia y una vez que has pasado por ahí vas a darte cuenta de tus conductas insalubres y de tus conductas tóxicas.

Lean el libro “En la boca del cocdrilo”, comiencen a promover su salud mental a través de la psicoeducación, es una solución viable para empezar a sanar toda esta ola de violencia que estamos viviendo las mujeres, las familias y también los hombres

En mi perfil de Facebook tengo una página que se llama Ana Goffin un sitio donde publicó artículos www.anagoffin.com

EL MIEDO Y LA AUTOCULPA

—También hay un factor muy importante que es la autoculpa.

La culpa es todo un tema, de hecho pueden bajar mi libro sobre la culpa para dejar de autoinculparse, ese libro lo tengo en PDF gratuito en mi sitio web www.anacoffin.com se llama “La culpa tras la ventana “

—Un mensaje para todas las personas que viven con miedo en esta pandemia por COVID-19.

Creo que el miedo es protector, volvemos a que los sentimientos son como las alarmas de un coche, si sientes miedo es porque hay un peligro, lo que no funciona es el miedo incluso el miedo te congela, te lleva a no poderte mover, pero en este momento bajo las circunstancias que estamos viviendo el miedo es un sentimiento natural ante lo que está pasando fuera y es un sentimiento que te dice ¡protégete, cuídate!

El miedo deja de servir cuando se convierte en un trastorno de ansiedad, pero mientras sea un miedo sano para protegerte es un miedo que es adecuado en este momento.

El miedo no es sano cuando dejas de dormir, dejas de comer, ese miedo ya rebasó los límites normales o por ejemplo tienes fobias, o cuando empieza a tener ataques de pánico, concluyó.

“En la boca del Cocodrilo” es un libro conmovedor y reparador que nos regala caminos para sanar y prevenir, desde la psicoeducación. Sin esta herramienta, será imposible erradicar este mal que nos aqueja.

Ana Goffin tiene 32 años años de casada “con un hombre maravilloso, fuera de serie”; como lo describe la doctora, quien dedica su libro “En la boca del cocdrilo” a linaje femenino hacia arriba, a sus dos hijas y nieta.

 

“Yo estoy viva porque mi padre tenía mala puntería”… Esto debe terminar. La agresión ejercida por nosotras, no es el camino. La psicoeducación sí nos abre una puerta al amor y las relaciones humanas saludables.

Ana Goffin

 

Ana Goffin de nacionalidad belga mexicana, es además conferencista y psicoterapeuta. Cuenta con dos Doctorados Honoris Causa, uno por el Claustro Doctoral Iberoamericano y otro por el Claustro Doctoral Honoris Causa en la UNAM.