Recuperación lenta e inestable

 

• Venden parte de sus activos, como camionetas y otras propiedades

 

 

Chetumal.- El sector del turismo continúa gravemente afectado por la crisis económica que se derivó de la contingencia sanitaria y es que a pesar de la reactivación del sector en junio del año pasado, su recuperación ha sido lenta, paulatina e inestable, ya que con los constantes cambios de color en el semáforo epidemiológico y sus distintas restricciones, no han podido operar de forma habitual y continúan registrando más pérdidas que ganancias.

Caso tal, es el de los hoteleros en la zona centro y sur de Quintana Roo, quienes ante la ausencia de viajeros, las restricciones de aforos y su lucha por mantener a su plantilla de trabajadores, al mismo tiempo en que sostienen los gastos operativos y de servicios, se vieron en la necesidad de adquirir fuertes deudas con entidades bancarias, quienes ya los tienen “ahorcados” para cubrir la falta de pago.

Es por lo anterior que el sector hotelero se vio en la necesidad, ahora de comenzar a vender parte de sus activos y poder cubrir con ello los adeudos contraídos con la banca, asimismo, para pagar sus impuestos, ante la falta de ingresos por el desplome en la ocupación hotelera.

La presidenta de la asociación de hoteles en esta región, Bertha Medina Núñez de Cáceres, explicó que los hoteleros se vieron en la necesidad de contratar préstamos con diferentes instituciones financieras. “De alguna manera teníamos que sobrevivir, pero en estos momentos, estas deudas ya nos representan una carga adicional, pues desde mayo y junio del año pasado muchos se vieron en la imposibilidad de seguir pagando. Pues se esperaba que esto fuera algo pasajero y ya se extendió por un año”, comentó.

Añadió que “ante la falta de ingresos, sin arribo importante de turistas, con las restricciones y demás obstáculos, nos hemos visto en la necesidad de comenzar a vender camionetas, propiedades y otros activos que nos permitan tener recursos para pagar esos créditos”, señaló.

Ya cerraron nueve y 15 más están en riesgo

Medina Núñez de Cáceres recordó que “el año pasado cerraron en forma definitiva tres hoteles en Chetumal y seis en Bacalar, mientras que para e2020 otros 15 están en riesgo de paralizar actividades ya que han agotado sus ahorros y han saturado sus tarjetas de crédito”, explicó.

Lo anterior, prevé que va a representar una afectación a la asociación que en estos momentos se compone de 90 empresarios hoteleros “la situación económica es complicada en ese proceso de recuperación, ya que no todos podrán aguantar la operación en espera que la población sea vacunada contra la Covid-19. El cierre de hoteles es una afectación directa a la asociación, esperamos que de alguna manera se pueda ayudar al sector, del que ya no hay duda, es el más afectado por la crisis económica y la contingencia sanitaria”, aseveró.

Concluyó que “Aunque tengamos la posibilidad de recibir turismo no podremos enfrentar la carga financiera que representan las deudas y la afectación se prolongará mucho más tiempo” advirtió.

Permisos son incosteables para ambulantes en Chetumal

Propietarios de negocios ambulantes ahora deben pagar hasta 800 pesos mensuales por un permiso que anteriormente encontraban desde 150 pesos, es decir, que se ha vuelto incosteable para ellos cubrir ese pago, ya que argumentan que los ingresos que tienen no son suficientes para este tipo de impuesto.

Julio René Medina Estrella, secretario general del pequeño comercio en Chetumal, confirmó que el número de agremiados aumentó durante la contingencia sanitaria, a la par que el desempleo, pues muchos al perder su trabajo formal, migraron al ambulantaje.

“Lo más preocupante para las familias no es la competencia que se da entre un vendedor y otro, sino que el costo del permiso para vender sus productos, ya que este se ha elevado en la presente administración en un 300 por ciento”, denunció.

Explicó que el personal de Fiscalización municipal exige a los ambulantes permisos por cada producto que comercializan, cuando antes se trataba de un solo permiso general “Si vendes tacos, necesitas un permiso para eso, otro más para vender refrescos y aguas, otro más si ofertas servicio a domicilio. Nos tienen hasta el cuello con todos esos cobros”, aseveró.

Medina Estrella dijo que en este momento los comerciantes ambulantes no tienen 800 pesos para pagar un permiso, “las ventas son muy bajas porque la población no tiene poder económico. Por otra parte la administración municipal también busca aplicar multas a quienes ofrecen sus productos desde casa, llegando a cobrar hasta 5 mil pesos a quienes resulten sancionados”, advirtió.

Empresarios de Chetumal excluidos de estímulos fiscales

De acuerdo con el presidente de la Coparmex en el sur del Estado, José Luis Mingüer Alcocer, la disminución del IVA e ISR anunciada por el gobierno federal es un riesgo para el 70 por ciento de los comerciantes que no podrán gozar de este beneficio, pues corren el peligro de cerrar ante la competencia que representan las grandes cadenas comerciales y tiendas de autoservicio.

“La mayoría de las empresas en Chetumal se dedican al rubro de servicios, por lo cual no se podrán incorporar a los beneficios fiscales para ofrecer el IVA al 8 por ciento sin contar aquellos servicios profesionales y servicios financieros que tampoco entran dentro del acuerdo publicado por el gobierno federal” explicó

Por lo que sus estimaciones son que “Estamos considerando que, en primera instancia, un 70 por ciento de las empresas no entran en el acuerdo por el Régimen de Incorporación Fiscal en el que se encuentran y en el 30 por ciento restante tampoco entrarían aquellos que ofrecen servicios financieros o profesionales”. En este escenario, únicamente estarían en la posibilidad de ofrecer un IVA al 8 por ciento aquellas tiendas comerciales y de autoservicio.

Mingüer Alcocer dijo que presentarán una nueva solicitud ante la Procuraduría para la Defensa del Contribuyente (Prodecon) para ampliar el plazo de inscripción al acuerdo, así como las campañas de información para que los empresarios conozcan el contenido del decreto.

El primer plazo de ampliación venció el 11 de febrero, por lo que la nueva ampliación sería hasta el 15 de marzo, señaló y reiteró que hasta el momento los estímulos fiscales anunciados por el gobierno federal únicamente se han convertido en un problema.

“Las que tienden a desaparecer son las tiendas familiares que no pueden competir con las grandes cadenas comerciales y preocupa porque el anuncio era para que los empresarios locales sean beneficiados”, concluyó.