Pese a ley de libre tránsito

• Bañistas denuncian al Mandala Beach por la instalación de vallas 

El Mandala Beach Club insiste en privatizar las playas de Cancún, con la colocación de una valla divisoria.

Cancún.- Han pasado cinco meses desde que entró en vigor una ley que obliga a los concesionarios de la zona federal marítimo terrestre de permitir el libre tránsito, no obstante, el Mandala Beach Club insiste en privatizar las playas de Cancún, con la colocación de una valla divisoria.

De tal manera que la música del Club de Playa del Mandala en altos niveles de volumen, es lo menos grave, pues su personal comenzó a colocar una serie de postes de madera unidos por un cordón para delimitar “su playa”, donde permiten que sus clientes se pasen por alto todas las medidas de sanidad.

No hay que olvidar que a partir del 21 de octubre de 2020 entró en vigor un decreto para garantizar el libre acceso y tránsito en las playas, a través de la Ley General de Bienes Nacionales, la cual establece que el acceso a las playas marítimas y la zona marítimo-terrestre contigua a ellas no podrá ser inhibido, restringido, obstaculizado ni condicionado.

Este decreto habla de sanciones para los titulares de concesiones de zona federal, autorizaciones, permisos y acuerdos de destino o propietarios de terrenos colindantes a ésta, “que por cualquier medio o acto impidan inhiban, restrinjan, obstaculicen o condicionen el acceso a las playas o a la propia zona federal”, lo cual sigue sucediendo de manera indiscriminada.

Se sabe que personal de Zofemat asegura haber invitado al concesionario, en este caso Mandala, a que retire las vallas que impiden el libre tránsito en esta zona de playa de Cancún. Sin embargo, al menos hasta el cierre de esta edición, la Zofemat no ha recibido respuesta alguna y la valla permanece.

De acuerdo con el Reglamento para el Uso y Aprovechamiento del Mar Territorial, Vías Navegables, Playas, Zona Federal Marítimo Terrestre y Terrenos Ganados al Mar, en su artículo 7, tampoco se puede limitar el tránsito en las playas mexicanas, pues la fracción II de ese artículo establece “se prohíbe la construcción e instalación de elementos y obras que impidan el libre tránsito por dichos bienes (playas) con excepción de aquellas que apruebe la Secretaría atendiendo las normas de Desarrollo Urbano, arquitectónicas y las previstas en la Ley General del Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente”.

De tal manera que con clubes restringiendo la circulación de la gente de forma libre en las playas; con grupos de banda tocando, una caseta de guardavidas obstruida y la violación permanente de las medidas para prevenir el contagio de Covid-19, es como se vivió el fin de Semana Santa, situación que se repite fuera de otros lugares, como Punta Cancún, centro de la zona turística de la ciudad, donde la gente camina sin cubrebocas y sin sana distancia.

No termina la “pesadilla”: bañistas
siguen llegando a playas cancunenses

Aunque ya pasó la Semana Santa, muchos vacacionistas continúan llegando a las playas de Cancún, incluso los primeros días de esta semana se tuvo una afluencia bastante importante después del mediodía, siendo principalmente los turistas nacionales, quienes permanecen en esta ciudad, aún a pesar de que la bandera amarilla ondeaba en playas como Delfines, Gaviota Azul, Chac Mool y Del Niño.

Es así que, decenas de personas decidieron llegar a los arenales de la zona hotelera e incluso de la Subdelegación de Puerto Juárez para nadar en el Mar Caribe, aún sin respetar las medidas de prevención frente a la Covid-19, lo cual continúa siendo un riesgo para todos, tanto turistas como prestadores de servicios quienes se exponen a un contagio de Covid-19.

En los arenales como Delfines, se observó un área de estacionamiento casi sin espacio, aunque en la extensión del lugar las personas guardaban distancia debido a que las más de 100 palapas cuentan con distanciamiento y era en estas donde más se podían observar a las personas.

La bandera amarilla ondeó en los arenales de la zona hotelera de Cancún, por lo que los turistas que decidieron estar dentro del mar, tenían que guardar precaución y no poner en riesgo su vida, aunque los salvavidas, daban rondines.

Playa Chac Mool tuvo una afluencia moderada y el oleaje llegaba a verse más fuerte e incluso eran contadas las personas que estaban dentro del agua, en dicho lugar, se encontraban elementos de la Marina así como de la Policía Turística como parte del operativo “playas seguras”.

Donde la afluencia de personas aumentó más fue en playa Gaviota Azul, pues a pesar de que era inicio de semana, las camas y camastros a lo largo de la playa que se ubica en el kilómetro nueve de la zona hotelera, se encontraban abarrotadas por turistas. En este lugar se vieron elementos de la Guardia Nacional, realizando recorrido en la extensión del arenal para asegurarse de que nadie estuviese consumiendo o vendiendo alguna droga o bebidas alcohólicas.