Se desborda Covid en zonas turísticas

A tiempo..!

Vladimir Galeana Solórzano*

 

Sin lugar a dudas la irresponsabilidad es el origen de muchos males y pareciera que ahora estamos al borde de una serie de contagios a causa de no haber seguido las indicaciones que nos ha dado el gobierno para mejorar nuestras posibilidades de evitar ser infectados. El saldo había sido favorable a las intenciones del gobierno de Carlos Joaquín González y de los gobiernos municipales que han tenido que sortear todo tipo de eventualidades para mantener el cerco sanitario y evitar la propagación del virus.

Pero los grandes descuidos son algunas veces los que provocan las grandes desgracias y pareciera que la pandemia se ha desbordado en algunos lugares de Quintana Roo, el estado más turístico del país y quizá del continente y esa circunstancia ha hecho sonar las alarmas en todas las esferas gubernamentales ante la posibilidad de que existan restricciones en algunos lugares. Esta lamentable ola ha hecho sonar las alarmas y lo previsible es que se tomen fuertes determinaciones para contener la ola de contagios.

Habrá que señalar que los excesos del comportamiento de los visitantes siempre mantuvieron la alerta en las esferas gubernamentales, pero muchos visitantes se comportaron durante las fiestas decembrinas como si nada hubiera pasado a pesar de que las restricciones eran evidentes. Pero también habrá que señalar que el hastío también puede ser un elemento que coadyuvó a los rebrotes que surgieron en la zona turística. Por desgracia la relajación en las conductas de los visitantes colaboraron en mucho al agravamiento de la pandemia.

Una de las circunstancias más graves es que los visitantes no obedecieron las instrucciones que se les hicieron para evitar una nueva propagación de la pandemia, y hasta ahora las autoridades han tenido que realizar nuevas estrategias para evitar que los contagios se incrementen. La alarma se intensificó cuando se conoció el número de contagios en las últimas veinticuatro horas en las zonas turísticas ya que se registraron más de seiscientos treinta contagios. Sin lugar a dudas es algo que pudo haberse evitado, pero ahora se tendrán que endurecer las acciones para evitar una mayor propagación.

Y hay que puntualizar que también abona a esta circunstancia el hecho de que los propios pobladores de los once municipios de la entidad dejaron de cumplir con los protocolos que ha establecido el gobierno de Quintana Roo y los gobiernos municipales. En el pecado se ha llevado la penitencia, y seguramente habrá necesidad de incrementar las restricciones para detener la posibilidad de que existan mayores contagios a través del uso obligatorio del cubrebocas que hasta ahora ha sido uno de los elementos más eficientes para contener las defunciones.

Que bueno que hasta ahora se puede señalar que la ocupación hotelera en la zona turística ha sido alta y por demás benéfica para revertir las pérdidas a causa de la pandemia, pero que malo que la irresponsabilidad de los visitantes haya provocado un grave problema que tendrá que enfrentar el gobierno del estado a cargo de Carlos Joaquín González, quien hasta ahora se ha distinguido como el mejor gobernador en el rubro de los cuidados en la salud pública. Seguramente habrán nuevas restricciones, porque de lo que se trata es de evitar en lo posible los contagios para mantener la viabilidad turística que es la que mantiene vigente los procesos económicos de la entidad. Al tiempo.

vladimir.galeana@gmail.com

 * Lic. en Derecho por la UNAM. Lic. En Periodismo por la Carlos Septien. Conferencista. Experto en Procesos de Comunicación. Expresidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión, Miembro del Consejo Nacional de Honor ANPERT, con 50 años de experiencia en diversos medios de comunicación.

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