De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
De la nada apareció en Quintana Roo la unidad alrededor de la candidata de Morena, Mara Lezama, y no fue porque detrás de su figura se encuentra el mítico “Niño Verde”, Jorge Emilio González Martínez.
La unidad alrededor de Mara como candidata tampoco se debe a la habilidad del polémico Mario Delgado, pero como pocas veces se recuerda, los seguidores de un partido se volcaron a favor de la nominada por el Movimiento Regeneración Nacional. Recuerdan en el estado que la última gran convocatoria fue la nominación de Joaquín Hendricks Díaz.
El pase mágico fue la candidatura de José Luis Pech, como abanderado de Movimiento Ciudadano y el relevo de su primera nominación, Roberto Palazuelos.
Dice el propio Palazuelos que el MC se perdió la posibilidad de triunfo y tiene razón, ya que con él o con su nuevo candidato el MC no alberga posibilidad de triunfo y ayer Morena mostró que es “bola cantada” la victoria de Mara.
Eso sí, Dante Delgado evidenció otra vez su forma de operar dentro del partido de su propiedad y deja en claro que es, aunque lo niegue, una pieza importante para operar la Cuarta Transformación. El MC obtuvo su recompensa con el triunfo de Samuel García y hasta ahí llegan sus piezas que administren un estado.
Pero de tan revuelto que estaba Quintana Roo y ante el riesgo de perder la dorada joya de los comicios de junio próximo, los “morenos” debieron curar heridas, dejar ir una de sus piezas y cicatrizar alguna de las heridas que todavía supuraban.
El desgarriate en Quintana Roo se produjo cuando la senadora Marybel Villegas no quedó conforme con la nominación de Mara y buscó ser la candidata de MC, solamente que al tiempo se supo de su avanzado embarazo, por lo que el partido de Dante Delgado prefirió la figura del polémico Palazuelos, el que fue reemplazado por el otro senador de Morena, José Luis Pech, con poca oportunidad de ganar.
Pech pretextó que la sombra de Jorge Emilio dentro de Morena y detrás de la candidatura de Mara Lezama era motivo suficiente para migrar hacia otro organismo político.
Los ex gobernadores de Quintana Roo habían conformado un grupo opositor que pronto se fragmentó. Ellos se quejaban de la intromisión del “Niño verde”, verdadero padrino de Mara Lezama, aunque cada quien tomó su propio rumbo. Joaquín Hendricks consolidó la nominación de su hija Leslie como candidata del PRI, Félix González Canto se decantó por el respaldo al ahora descartado candidato, Roberto Palazuelos, por su cercana relación con Ivonne Ortega.
Otro de ellos y que sigue teniendo amplia injerencia en la actividad política es Mario Villanueva Madrid, quien mandó sendas condenas por la participación del “Niño Verde” dentro de Morena y el amplio poder que concentra en aquella paradisíaca entidad.
Sabedores de que Mario continúa teniendo gran fuerza política en el estado, se decidió negociar con él y en el respaldo de la candidatura de Mara apareció Isabel Tenorio, esposa de Villanueva Madrid, como figura principal.
La otra figura destacada fue la “rebelde” Marybel Villegas, la que negoció ser la alcaldesa suplente, una vez que nazca su criatura y así todos quedan en paz.
Ahora solamente falta esperar los resultados del 5 de junio y confirmar la victoria de Mara Lezama como primera gobernadora del estado de Quintana Roo.
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El sábado pasado falleció el Almirante Wilfrido Robledo Madrid, quien fue director de la AFI y de la Policía Federal, además de director de la Policía en Tabasco y en el Estado de México. Robledo es recordado por fungir también como alto directivo del Cisen, donde se formó el nefasto Genaro García Luna, del que se alejó desde hace varios lustros. Reconocido como operador de tácticas y estrategias policíacas. Encabezó el operativo para desalojar la UNAM tomada durante varios meses por un grupo radical y también fungió como director de la Policía del Estado de México en el desalojo de Atenco.
