Representante diplomático de Rusia afirmó que la guerra de Ucrania finalizará cuando “lo estimen necesario” y que están dispuestos a defender las posiciones de Moscú “hasta la muerte”.
El viceministro ruso de Asuntos Exteriores, Sergei Riabkov, afirmó que la guerra de Ucrania finalizará cuando “lo estimen necesario” y que están dispuestos a defender las posiciones de Moscú “hasta la muerte”.
Nuestra tarea es probar que esos planes (lograr la derrota de Rusia) fracasarán y que pondremos punto final a la operación militar cuando lo estime necesario Moscú, y no donde lo prefieran los estrategas, ideólogos y asesores en Washington”, remarcó Riabkov.
“Debemos probar con nuestra fuerza de voluntad, con el poderío de nuestras armas y con toda nuestra determinación que vamos a defender hasta la muerte las posiciones de Rusia”, enfatizó. En ese sentido, el viceministro de Exteriores confía en el triunfo a pesar que Estados Unidos y otros aliados de Kiev continúen suministrando armamento a las fuerzas ucranianas. “No hay otro guion que el que prevé el completo logro de nuestros objetivos”, remarcó.
“Estos objetivos se lograrán sin que importe cuántos sistemas envíen a Kiev los norteamericanos y sus seguidores”, aseguró Riabkov, quien ha responsabilizado al Gobierno de Ucrania y a sus “titiriteros occidentales” de torpedear las negociaciones para alcanzar la paz.
“En ellos recae la completa responsabilidad por la falta de paz en Donbás y en Ucrania” y “por el atascamiento de las negociaciones que no avanzan desde mediados de abril cuando la delegación ucraniana, azuzada por sus titiriteros occidentales, abandonó el proceso de diálogo”, protestó. En ese sentido, ha valorado que tanto desde Occidente como desde Ucrania están buscando “frustrar” una solución pacífica al conflicto y si bien ha asegurado que Moscú no renuncia a una salida diplomática, tampoco pueden “retroceder”. Así, recalcó, que es “elección” del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski y su equipo no estar “preparados” para negociar y seguir con la “locura” de “inundar” Ucrania de armas. “Por trágico que sea no podemos retroceder”.
