• En la actualidad, el mejor musical del mundo está en México

Gloria Carpio

Mary Poppins demostró que los sueños son posibles de lograr si así lo quieres, durante el supercalifragilisticoespialidoso estreno del musical de Disney y Cameron Mackintosh, hablado por primera vez totalmente en español.

Cuando hace unos meses anunciaron que el montaje Mary Poppins se presentaría en México totalmente en español, de manera inmediata se causó expectativa entre la comunidad teatral. El jueves por la noche esa expectativa quedó disipada y una vez más Ocesa demostró por qué es el rey de los musicales y es que en medio de un sinfín de invitados se presentó el musical al que acudió el jefe de gobierno electo del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera.

De esta forma la nana más musical del planeta llenó de colorido el Teatro 1 del Centro Cultural Telmex en el que se presentó ante un público ávido de magia, y entre el que se encontraban famosos como Carmen Salinas, Evita Muñoz Chachita, Adrián Uribe, Rocío Banquells, Guadalupe Pineda, Rosa Gloria Chagoyán, Rubén Cerda, Lolita Cortés, Rogelio Guerra, Lupita Jones, Héctor Sandarti y Tiaré Scanda, así como Rodrigo Abed, Lalo España, Édgar Vivar, Fela Fábregas, Susana Zabaleta, Yahir, Sergio Corona, Manuel El Loco Valdés, Mariana Treviño, Anabel Ferreira, Juan Torres y Alejandro Durán.

Pero sin duda quien sorprendió durante el musical, además de su protagonista Bianca Marroquín, fue Mauricio Salas, quien dejó boquiabierto al público con su trabajo, sobre todo al caminar por la pared y después por el techo del escenario al mismo tiempo que bailaba tap. El actor tuvo que vencer su temor a las alturas. La estructura mide 11 metros de altura y Mauricio Salas se enfrenta a la gravedad ante la mirada atónita y la ovación de los asistentes durante el número musical Ve al compás.

Mary Poppins, basada en los cuentos de la escritora P. L. Travers y en la clásica película de Walt Disney realizada en 1964, tocó el corazón del público al hacerlo reflexionar sobre el verdadero sentido de la felicidad.

Abunda en la vida de una familia británica, cuyo padre es banquero y la madre sufragista. Tienen dos niños rebeldes que a toda costa buscan llamar la atención de su papá, quien dedica la mayor parte de su tiempo a trabajar, al llegar Mary a la casa de los Banks, los niños conocen que lo verdaderamente importante en la vida son los pequeños detalles que ella les hace ver sean importantes. Una cocina en desorden quedará reluciente, las estatuas y los juguetes cobrarán vida.

En el escenario se vio un equilibrio perfecto, ya que las coreografías hicieron perfecta combinación con la escenografía e iluminación también se distinguen por su fastuosidad y coordinación que contagian a los espectadores, pues en el intermedio decenas de personas trataban de emular con entusiasmo los movimientos en el número Supercalifragilisticoexpialidoso.

En este musical, el número 21 producido por la División Teatro de Ocesa, Morris Gilbert y Federico González Compeán, logran mostrar un montaje perfecto al espectador que queda maravillado con el alarde tecnológico que se hace en esta pieza digna de ser vista una y otra vez.

Con Bianca Marroquín y Mauricio Salas a la cabeza del elenco, dio inicio el viaje mágico hasta Londres, sitio donde se desarrolla esta hermosa historia de amor, valores y sobre todo entrega. México quedaba a las afueras del teatro porque adentro todos estaban en la casa de una familia que comprendió el verdadero valor de la disciplina y la amistad a través de su feliz y amorosa nana, Mary Poppins, quien en medio de aplausos, alzó el vuelo con su clásica sombrilla que la acompañó en algunas coreografías.

“Oficialmente Mary Poppins ya está en México, ha habido muchas cosas y muchos obstáculos, pero todos los vencimos. Lo que he hecho en Broadway es lo mejor que me ha pasado; soy una persona muy afortunada, lo reconozco, pero esta obra tiene mucha magia y lo que me hace sentir no lo había sentido antes con otro proyecto. Es una emoción que no puedo ni describir porque es muy intensa”, comentó Bianca al término de la función.

Por su parte, Mauricio, quien ejecuta perfectas coreografías, indicó que esta pieza le ha hecho enfrentar miedos que ahora ha vencido, como el pánico a las alturas, gracias al tiempo que pasó entre tarimas.

Sabías que…

*** 213 personas trabajaron en la preproducción del montaje: 27 creativos y coordinadores extranjeros, 42 integrantes del elenco, 31 músicos (incluyendo alternantes y pianistas de ensayos), 113 personas de producción local, sin contar las áreas de apoyo como mercadotecnia, administración, prensa, taquillas, etc.

*** En cada función, 127 personas estarán sobre, abajo, arriba o a un costado del escenario (41 integrantes del elenco, 18 músicos, 59 técnicos y 9 personas de producción y dirección).

*** El espectáculo incluye 36 cambios escenográficos, que significan mover entre 17 y 18 toneladas de peso, buena parte de las cuales viajó desde Nueva York en 9 gigantescos tráileres.

*** El vestuario cuenta con 258 cambios, que comprenden 2826 piezas, 245 pares de zapatos, 81 pelucas, 36 bigotes, 3 barbas y 28 juegos de patillas.

*** Moderno equipo de iluminación, compuesto por 302 reflectores en total, 90 luces robóticas, 40 luces LED, 300 dimmers convencionales, todo interconectado gracias a 10 mil metros de cable de iluminación.

*** 28 máquinas de humo, que dan un toque especial a muchas de las mágicas escenas de este montaje.