• La mayor y la más recurrente de las quejas es la atención agria y prepotente que los empleados le dan a los usuarios

Alberto Aguilar

Ulises Vallejo: “Desde hace un año, mi recibo ha estado llegando muy alto en la tarifa, ya lo he reclamado muchas veces y no me hacen caso. La Profeco trabaja con ellos.

Cancún.- En los últimos 12 meses, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) se ha convertido en “el villano favorito” de los quintanarroenses, al encabezar la lista de las paraestatales denunciadas en Profeco, así como la que mayores reclamos acumulan en sus módulos por consumos excesivos.

En un sondeo realizado por reporteros de Diario Imagen Quintana Roo, se estableció que ocho de cada diez habitantes del estado, han caído víctimas de los abusos y cobros exorbitantes que la empresa “de clase mundial”, les hace, sin importar la condición económica de las personas.

La mayor y la más recurrente de las quejas es la atención agria y prepotente que los empleados le dan a los ciudadanos que osan quejarse de los cobros no reconocidos, el insultante contubernio que mantiene la Profeco Quintana Roo, con los encargados de atención a clientes, al grado de  tener una oficina dentro de la misma dependencia.

Por ejemplo, entrevistado sobre el particular, el señor Ulises Vallejo dijo que tienen un año de que su recibo está llegando con sumas exorbitantes, que se presume él no consume y agregó que se ha personalizado a reclamarle hasta al gerente Gerardo Castañeda y no le presta la mínima atención.

La Profeco trabaja con ellos, opinó.

Por otro lado, la usuaria Patricia Noh Martín se quejó de que los abusos de la CFE son cada día mayores y lamentó que esta situación no sea escuchada por nadie, ya que al recurrir a los módulos de quejas de las diferentes dependencias, pues no son escuchados y abundó que existen medios que no quieren sacar las denuncias del robo de la CFE.

Néstor Castillo invitó a que la ciudadanía se organice y se una, para realizar las manifestaciones contra los abusivos cobros de las tarifas eléctricas, “pues los apagones nos funden nuestros aparatos y nadie se hace responsable para reponerlos”.