El general Bibiano Villa afirmó en exclusiva para Diarioimagen de Quintana Roo que la gran cantidad de errores con las armas de cargo que han cometido en el estado los guardaespaldas, escoltas o guaruras de los políticos y funcionarios, constituyen un uso indebido de las mismas, como ha ocurrido en el caso del encargado de la seguridad del presidente municipal de Benito Juárez, Julián Ricalde, o el caso del escolta del alcalde de Playa del Carmen, Filiberto Martínez, entre los más sonados.
Se debe al temor que sienten esos individuos y a la falta de capacitación para desempeñarse en ese trabajo.
El general señaló que está dentro de las facultades de la Secretaría a su cargo la supervisión y capacitación de esos elementos, antes de ser empleados como guardaespaldas y fue un acuerdo que se tomó a nivel estatal con los 10 presidentes municipales, pero hasta el momento ninguno se ha presentado a recibir algún curso de capacitación y mucho menos que hayan aprobado un examen teórico y práctico del manejo y uso de armas de fuego para el desempeño como escoltas.
Añadió que en el caso del custodio de Julián Ricalde, Gamaliel Ramos Reyes “El Chester”, es el responsable de lo que se haya hecho con el arma calibre 9 mm., porque es él quien debe responder por su pistola y calificó como irresponsabilidad haber dejado que su arma fuera manipulada por su pariente Pedro Agustín Méndez Hau, quien la accionó hiriendo en la cabeza a Carmelo Méndez Rivera, cuyo disparo salió por la nariz y se impactó en el respaldo del asiento del copiloto.