• El líder nacional del PRD asegura que la defensa ha demostrado que no había ninguna razón para juzgarlo

Alejandro Garduño

“Los jueces hoy han analizado el expediente y la defensa ha demostrado que no había ninguna razón para juzgar a Gregorio Sánchez”: Jesús Zambrano, líder del sol azteca. (Foto: Especial)

México, D.F.– El líder nacional del Partido de la Revolución Democrática, Jesús Zambrano, señaló que por parte de su partido y de la defensa de Gregorio Sánchez Martínez están preparando una demanda de juicio político en contra de quienes acusaron de diversos delitos como asociación delictuosa, lavado de dinero, delitos contra la salud y tráfico de personas a quien fuera alcalde de Cancún.

En entrevista vía telefónica, el dirigente comentó que desde hace 14 meses los perredistas han señalado que el juicio a Greg Sánchez era injusto, y que no se trataba de juzgarlo por los delitos que se le imputaron, sino por motivos políticos y un uso faccioso de la Procuraduría General de la República y del Ministerio Público federal.

Afirmó que dicha acusación y encarcelamiento se llevó a cabo con un solo objetivo: sacarlo de la contienda electoral a quien iba por el puesto de la gubernatura del estado de Quintana Roo.

Los jueces han analizado el expediente y la defensa ha demostrado que no había ninguna razón para juzgar a Gregorio Sánchez, ya que no había posibilidad de probar los delitos de los que se le había acusado.

A pesar de que la procuradora Marisela afirme que se puede apelar, no tienen los elementos para volverlo a encarcelar y no les quedó de otra que arraigarlo con un brazalete.

En tono molesto dijo que días antes de que quedara totalmente libre la procuraduría una vez más sale con una serie de mentiras y abuso en el empleo de la figura del “testigo protegido”, lo cual refleja que hay desesperación por parte de las autoridades por retener a Gregorio en la cárcel.

Agregó que el nuevo argumento para retenerlo es que al ser alcalde de Cancún organizó actos culturales para que participaran cubanos, quienes una vez estando en Cancún, ya no regresaban a Cuba y se dirigían a Miami; eso suena irrisorio puntualizó Zambrano y añadió que entonces implicaría que las autoridades cubanas, y las de migración de ambos países estarían en contubernio con Gregorio Sánchez. Seguramente esas acusaciones también se van a venir abajo, ya que son parte de un nuevo ataque faccioso.