Eminencia de la medicina en nuestro país
- Es jefe de Neurocirugía del Hospital Regional de Alta Especialidad de Ixtapaluca
Arturo Arellano
El doctor Juan Manuel Salgado Camacho es jefe de Neurocirugía del Hospital Regional de Alta Especialidad de Ixtapaluca, quien desde hace muchos años ha entregado su vida y profesionalismo a la salud de los mexicanos.
En entrevista para DIARIOIMAGEN, nos contó un poco de lo que ha sido su formación y trabajo profesional en esta área de la medicina: “Soy médico cirujano por la UNAM, luego hice una especialidad en neurocirugía en el Hospital General de México, avalado también por la UNAM, e hice una subespecialidad en base de cráneo y lo que es básicamente operar con endoscopia, y tengo una maestría en neurociencia por la Universidad de Sevilla, además de estudios en Historia del arte”.
Sobre ese último punto afirma que “me ha permitido acercarme a una rama fascinante, que es la neuroestética a partir de las neurociencias y cómo se relaciona la creación artística y apreciación de la belleza a través de las neurociencias”.
Explicó que básicamente un neurocirujano es una persona entrenada en ámbito médico, para resolver desde un punto de vista quirúrgico las enfermedades neurológicas, y de la columna, “porque también operamos la columna, hay una diferencia entre nuestros colegas neurólogos y neurocirujanos, pues si bien, ambos enfrentamos enfermedades del sistema nervioso central; los neurocirujanos tenemos el recurso de operar”.
Dentro de sus labores se encuentra organizar todo lo relacionado con las cirugías, “priorizar urgencias, organizar insumos, hasta llevar a cabo una cirugía con éxito. Además, soy profesor titular del curso de neurocirugía en el hospital. Así que también me dedico a la formación de neurocirujanos, que ya son médicos generales”.
Crisis por accidentes en moto
Al cuestionarlo sobre los problemas más frecuentes en México, relacionados con el sistema nervioso central comentó: “Lo más común son los traumatismos craneoencefálicos y aquí el tema de prevención que es fundamental, porque una gran cantidad de los que atendemos en el hospital donde trabajo son los accidentes en motocicleta, y estoy seguro que eso se repite en todos los centros de atención médica”.
Lamenta que “las personas no usan casco, es un problema de salud pública, se trata de personas jóvenes entre 18 y 45 años, que enfrentan golpes fuertes en la cabeza y entran de emergencia, los operamos, pero solo un porcentaje menor a 10 puntos, recuperan sus funciones, mientras que, más del 50 quedan con secuelas graves que requieren un cuidador para el resto de su vida, quedan en estado vegetativo”.
Recuerda, que el problema es tal que “hace cinco años personalmente lo presenté durante una mesa de trabajo en la Cámara de Diputados, es un problema serio, además de que representa gastos terribles en hospitales. Cuando alguien sufre un accidente de ese tipo, requiere de mes o mes y medio en terapia intensiva, lo que es muy caro. De tal suerte que, es mejor prevenir, manejar con precaución y usar casco”.
Tumores cerebrales, un gran problema
Asimismo, destaca que los tumores cerebrales son un gran problema “hay de muchos tipos, pero en mi área de especialidad me ayuda a atenderlos mejor, porque operó tumores cerebrales con endoscopia, es de menor riesgo y los pacientes se reintegran a su vida de una manera más rápida que cuando se hacían procedimientos más complejos abriendo el cráneo. No todos se pueden operar con endoscopia, pero muchos sí”.
Asimismo, destaca la técnica de cirugía “despierto, dormido, despierto”, en la que describe “es para cuando un tumor sale en un área del cerebro que tiene función elocuente, como el lenguaje, hay tumores que salen en esa área y para limitar secuelas, se lleva el paciente a cirugía, se anestesia y cuando abrimos la piel, músculo, hueso y cubierta del cerebro que se llama duramadre, se le despierta y se le opera despierto con neuropsicólogos. Llevamos hasta hoy cerca 43 pacientes con esa técnica y ninguno con complicaciones graves”.
Celebra que esta técnica se hace desde hace muchos años “aquí hay centros grandes que la realizan, en la Ciudad de México, Hospital General De México, Centro Médico La Raza, Hospital Siglo XXI, en el 20 de noviembre, los centros más importantes del país ya cuentan con esta opción”.
Tecnología avanza en la medicina
Por otro lado, celebró que la tecnología está sumando positivamente a los avances médicos en esta área. “Es algo muy interesante y fascinante, porque en los 90’s, los europeos notaron que su expectativa de vida se estaba prolongando, pero en medida que vivían más tiempo, aparecían otras enfermedades neurológicas,, como la demencia, de modo que, determinaron que en los siguientes 10 años, se iba a hacer un proyecto dedicado al cerebro humano el ‘Human Brain Project’, se invirtió mucho dinero de la comunidad europea para las neurociencias y cuando se planeaba que llegaría a su fin en 2020, se alargó por otros 10 años y terminará por el 2030”.
Después, Estados Unidos hizo lo propio y realizaron la denominada “Década del Cerebro”, de la cual Salgado nos cuenta “ha sido fundamental porque hoy contamos con aparatos que antes no había, neuronavegadores, aspiradores ultrasónicos, endoscopios, quirófanos de neurocirugía, diseñados para este tipo de procedimientos, que requieren de gran tecnología, sin duda se facilitan las cosas y se evitan mayores complicaciones”.
Vacuna contra Covid, sin secuelas graves
En cuanto al paso de la pandemia por el Covid-19 nos contó: “Nuestro hospital fue Covid, atendimos a muchos pacientes y es el único que publicó un libro con toda la experiencia en relación a este problema. De hecho, Patricia Meza, infectóloga del hospital, ganó el premio nacional en atención a la Covid, recibió una medalla del gobierno. De tal suerte que se publicó un libro muy bien realizado por todos los servidores que atendieron que prácticamente fuimos todos”.
Recordó que “al principio no sabíamos, pero fuimos aprendiendo, afortunadamente se salvaron muchos pacientes. En aquel momento se redujo la atención a pacientes con neurocirugías y sólo atendíamos emergencias reales, como traumatismos que se tienen que operar en el momento, pero selectivas de tumores, de columna, se dejaron de operar, actualmente, ya se normalizaron las atenciones.
Y sobre la vacuna dijo “Hasta donde tengo conocimiento, existe siempre un riesgo cuando se administra una vacuna, de reacciones adversas menores y mayores. Las menores es que duele la cabeza, se tiene malestar general, dolor de cuerpo, dolor donde se aplica, eso es normal hasta cierto punto. Por otro lado, en muy bajo porcentaje hay reacciones mayores como trombosis, reacciones de alergias de choque anafiláctico o síndrome de Guillain-Barré, que es parálisis progresiva. No obstante, los riesgos eran mucho menores que el beneficio que representaba vacunarse”.
Atención oportuna a problemas neuronales
Finalmente, hizo un llamado a la población a estar atentos a los síntomas de las enfermedades neuronales, que, si bien no se pueden prevenir, si se pueden atender a tiempo “Básicamente todos los tumores cerebrales pueden ocasionar problemas y no hay manera de prevenirlos, sin embargo, debemos estar atentos a los dolores de cabeza, si padecemos alguno de más de dos semanas de evolución, es importante acudir a valoración con especialista neurólogo”.
Asimismo, dijo que algo muy importante es “si hay crisis convulsivas en niños o adultos, tienen que acudir con un especialista. También si un niño tiene regresión de sus capacidades neurocognitivas, por ejemplo: el niño de tres años corre, hace travesuras, pero juego ya no camina bien y deja de mover alguna extremidad, es un signo de alerta. Porque hay que recordar que los problemas más frecuentes en los niños son leucemias, pero los segundos son los tumores cerebrales” concluyó.
E invitó a la población interesada en una atención más personalizada a acudir también a su consultorio privado ubicado en la Colonia Roma, Calle Mérida 64, interior 106. Previamente pueden acordar una cita en el correo o al teléfono 5514502490.
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