- Hay competencia de tianguis y vendedores ambulantes
Cancún.- El vicepresidente de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo de Cancún -Canaco-, Rafael Ortega Ramírez, dijo que sus ventas han bajado entre un 10 y 12 por ciento, que repercutirá en el cierre de 370 comercios en este año. Ahora hay muchas promociones para pagar con tarjeta de crédito a meses sin intereses y los tianguis, donde la gente encuentra de todo a precios accesibles, también les representa competencia que los está sacando del mercado, generando que comercios establecidos de muchos años tengan que desaparecer.
Rafael Ortega señaló que hay una diferencia entre el 25 y 30 por ciento de aumento en los precios, que los comerciantes establecidos no pueden aguantar, es por ello que tienen que vender más caro y finalmente quedan fuera de competencia con otros mayoristas, motivo por el cual el año pasado cerraron 324 socios de la Canaco, de 4 mil 850 que tenían y este año, hasta hoy llevan 370 que cerrarían de aquí a diciembre, que son 50 más que el año pasado.
Ahora un tianguis es un supermercado, tiene de todo, incluso mueblerías que por la baja de sus ventas, optan por vender en esas plazas que hay por toda la ciudad, donde la gente también encuentra zapaterías que antes estaban establecidas en el centro de la ciudad.
“Precisó que el espíritu de competencia ya no es el mismo, ahora prevalece la competencia desleal porque no hay pago de impuestos, ni derechos al ayuntamiento, por eso todos quieren vender en los tianguis, aunado al incremento del precio de la gasolina y al aumento del dólar, lo cual está afectando seriamente al comercio, porque muchos de los productos que usan las tiendas de abarrotes son importados, ya que normalmente se surten en supermercados de mayoreo, como Cotsco y Wal Martk, que tienen muchos productos importados.
El vicepresidente de la CANACO concluyó al expresar que los que cerrarán sus puertas al público, principalmente son zapaterías, abarrotes, papelerías, sin contar los negocios de alimentos, que se terminarán yendo a los tianguis, aunado a la inseguridad que hay en las zonas irregulares; “nosotros implementamos un botón de pánico hace dos años, pero no hubo interés y por eso muchos trabajan con reja”, concluyó.