En la ruta de las letras
Patricia Correa
- El escritor y conferencista mexicano asistió a una emotiva convivencia con ocho de sus lectores, ganadores del concurso de ensayo de Sheccid: Cuando el amor duele
“Cuando uno escribe, tú no sabes qué corazón vas a tocar, que mente vas a hacer reflexionar”, señala el best seller Carlos Cuauhtémoc Sánchez. (Foto: Patricia Correa).
Con motivo del lanzamiento de Sheccid: Cuando el amor duele (Grupo Editorial Diamante), el escritor y conferencista mexicano, Carlos Cuauhtémoc Sánchez, asistió a una emotiva convivencia con ocho de sus lectores, ganadores del concurso de ensayo de Sheccid: Cuando el amor duele.
Esta casa editorial, DIARIO IMAGEN, invitada especial a este evento realizado en el Restaurante Gratinadys Cheese & Shakes, entrevistó al Best Seller, Carlos Cuauhtémoc Sánchez, quien ha sido colaborador en diversos foros de radio y televisión como especialista en el área de formación humana.
“Cuando uno escribe, tú no sabes qué corazón vas a tocar, que mente vas a hacer reflexionar, este es un concurso que hicimos a través de las redes sociales, solicitándole a los jóvenes que quisieran a hablar sobre el libro, y recibimos más de mil ensayos extensos de cinco cuartillas, donde narran sus experiencias de cómo es que el libro les tocó y cambió su forma de pensar, sobre cómo fue que pasaron con el libro un momento muy intenso de emoción y elegimos 20 ensayos de lectores de todo el mundo, y ocho son los que pudieron venir a la cita”, señaló Carlos Cuauhtémoc Sánchez a Asael Grande, quien lo entrevistó.
Sobre qué significa para Carlos Cuauhtémoc Sánchez ser un escritor que influye en el lector joven, adolescente, compartió que “es una enorme responsabilidad, sabes que la gente te lee, pero también te observa, te observa vivir, entonces yo tengo un compromiso personal conmigo mismo, que es que todo lo que yo escribo está respaldado por lo que yo soy, por lo que yo hago, entonces sí es una gran responsabilidad, también he aprendido que en tu trabajo tienes que dar lo mejor de ti, y dejarle a Dios los resultados, nuestro trabajo es hacer lo que te toca hacer, hacerlo bien”.
Acreedor del Premio Nacional de las Mentes Creativas otorgado por la Dirección General del Derecho de Autor y el Premio Nacional de la Juventud en literatura, otorgado por el presidente de México, Miguel de la Madrid Hurtado, en 1984, Carlos Cuauhtémoc Sánchez, agregó sobre el mensaje y el cúmulo de valores de sus libros que inspiran a sus lectores: “mi abuelo era escritor, y él decía que todo lo que a mí se me ocurría escribir ya estaba escrito, pero que nadie lo podía escribir como tú lo puedes hacer, cada uno tenemos un sello, una huella digital, una forma de respirar la literatura y las ideas, creo que cualquier cosa que uno escribe es único, aunque ya se haya escrito sobre lo mismo; ¿qué me falta por escribir?, no lo sé, porque yo escribo un libro cada año, y ese libro que escribo es una respuesta a una sensación que me va surgiendo durante ese año, entonces cuando escribo sobre anorexia es porque vi un tema de anorexia muy cercano a mi vida, y de gente que me da sus testimonios, o cuando escribí sobre drogas es porque había algo muy cercano que me estaba atormentando el corazón, yo no concibo escribir sin dejar un mensaje, cuando tú escribes está pasmada tu personalidad, y aunque no lo digas de manera explícita, los personajes lo dicen, ellos toman decisiones, ellos toman un camino, entonces vas dejando una estela de mensaje, pero eso no nada más ocurre con mis libros, sino con cualquier libro, el autor se refleja en sus palabras, entonces lo que sí sé es que mientras viva voy a escribir”.
Los afortunados ganadores a la convivencia con el autor fueron: Josselin Paulina Chandhel Ochoa Guzmán (Guatemala), Keshia Paola Porras Mitre (Costa Rica), Karla Yesenia Alonso Coconi (Puebla), Andrea Lizbeth González Ovando (Estado de México), Dania Marin Álvarez (Tlaxcala), Anallely Sánchez Cano (Hidalgo), Tania Guadalupe Ortiz García (Veracruz), Sergio Mijael Reza (Taxco).
Dinámicas sobre Sheccid: Cuando el amor duele; lecturas en voz alta, experiencias de vida, e intercambios de opiniones acerca de los ensayos escritos por los lectores, fueron parte de la convivencia con el escritor Carlos Cuauhtémoc Sánchez, quien les dedicó unas palabras: “me doy cuenta que el oficio de escribir es muy solitario, en realidad cuando escribes pasas mucho tiempo sólo, y no te das cuenta cuánto vale lo que haces hasta que recibes la retroalimentación de personas como ustedes, porque te das cuenta que, a pesar de que pasas muchas horas encerrado en tus pensamientos e ideas, estás conectándote con gente, ustedes le dan valor a mi trabajo, a todo lo que hago, y estoy muy agradecido por ello, por lo que escribieron, y porque han leído mi libro favorito que es Los ojos de mi princesa, es el libro que habla más de mí, el que más de mi corazón, más de mi esencia, de mi persona, creo que somos aves de la misma especie”.
