• Aparecen cartulinas en la Nichupté y el panteón Los Olivos

Dos presuntos narcomensajes ponen a temblar a las autoridades, las cuales sostuvieron ayer una reunión secreta en el C4.

Cancún.- Dos narcomensajes dejados en distintos puntos de la ciudad entre la madrugada y la mañana de ayer, han provocado una serie de reuniones y medidas de seguridad en las dependencias policiacas de la ciudad.

El primer narcomensaje fue dejado en una calle poco iluminada cerca de la avenida Nichupté, donde se advertía a un supuesto comandante de la Policía Federal de apellido Carmona, para que devuelva una cantidad de dinero no especificada, la cual habría sido pagada por integrantes del narcotráfico para que les diera protección.

Según ha trascendido, en la cartulina se amenaza a dicho agente federal y de le advierte que podría aparecer “como rompecabezas”.

Una segunda cartulina fue colgada por presuntos integrantes de un grupo delictivo que no se identificó, en la puerta del panteón Los Olivos, a unos metros del centro penitenciario.

Aunque los responsables de este narcomensaje no se identificaron, se entiende que pretenden tener el control de la venta de drogas al interior del Cereso.

En ésta se leen nombres de internos que aparentemente estarían cobrando cuotas y extorsiones a reos de recién ingreso, así como a sus familiares

Además, se exige al director del Cereso, Fermín Cortés Burgos, para que frene a los de la Comitiva, o de lo contrario empezarían ha realizar ejecuciones.

Ante esta inusitada ola de mensajes ayer se registró una reunión urgente en la base del C4, a donde asistieron altos mandos de corporaciones policiacas, militares y de la Policía Federal, sin que se sepa el motivo o las conclusiones.