• La cadena hotelera celebra 40 años de vida y pretende llegar a 100 hoteles en el 2020

Jaime Andrés Arroyo Olín

Zona de alberca en el ahora Misión Grand Cuernavaca. / Foto: Jaime Andrés Arroyo Olín.

Cuernavaca, Morelos.- Con una inversión de 12 millones de pesos y un año de trabajo se llevó a cabo el cambio de categoría del hotel Misión Cuernavaca que luego de su transformación se convierte en Misión Grand Cuernavaca, inmueble que ahora tendrá un servicio personalizado, que se verá reflejado en clientes y huéspedes.

Como parte de la celebración por los 40 años de Hoteles Misión, la “ciudad de la eterna primavera” se puso de manteles largos para recibir el ascenso del ahora Misión Grand Cuernavaca. En estos 40 años, la cadena hotelera se ha definido por dos conceptos: mexicanidad y experiencia. La primera reflejada en cada uno de los hoteles que maneja y que son tan eclécticos con historia y gastronomía regionales, y la segunda relacionada íntimamente a la calidez de su personal, siempre orientada al servicio.

Además, el gobierno corporativo es un término que en Misión, llegó para quedarse, pues desde hace 10 años se ha trabajado en su institucionalización para mantener el equilibrio entre los objetivos e intereses individuales, sociales, comunitarios y económicos; promover el uso eficiente de los recursos y exigir que se rindan cuentas por la administración de los mismos; incentivar a la empresa, sus propietarios y administradores a adoptar las normas de gestión aceptadas a nivel internacional que los haga alcanzar las metas y atraer más inversiones.

Esto se traduce en un compromiso total con los estándares de calidad, no sólo de la norma ISO 9000-1, sino ahora con aquellos que forman parte de la certificación ISO 14000 para la cual se están preparando y afianzando de manera continua en las prácticas sustentables y de responsabilidad social.

Asimismo, la cadena hotelera trabaja en un plan estratégico y de ambicioso crecimiento que pretende llegar a las 100 unidades hoteleras para el año 2020, así lo afirmó Gastón Siles, director Comercial de Hoteles Misión durante la celebración del 40 aniversario de la cadena hotelera.

Por su parte, José Manuel Oviedo Arce, director Regional Centro del Hotel Misión Grand Cuernavaca y con 28 años de experiencia en la industria de la hospitalidad, comento que durante los cambios realizados se encuentran:

Remodelación de 180 habitaciones con colchones nuevos y ropa de cama, amenidades Grand, espejos de vanidad y secadoras de pelo; adaptación y remodelación del jardín principal que ahora funcionará como tres distintos espacios planos para la realización de eventos simultáneos o uno de gran capacidad; renovación de mobiliario y plaqué del restaurante Del Pueblito y del Bar Las Flores; instalación de camastros y sombrillas nuevas en el área de alberca.

El hotel está ubicado en Acapantzingo, uno de los poblados más antiguos de la ciudad  con  exótica naturaleza. Se dice que el Emperador Maximiliano de Habsburgo visita en el año de 1866 por primera vez Cuernavaca, acompañado por su esposa María Carlota, se enamoraron del paisaje y el maravilloso clima, solicita se le ubique una residencia fija y así fue que se quedaron en Cuernavaca. A tan importantes celebridades, se les acondiciona la antigua casona de La Borda. El Jardín, las fuentes, el clima y la hermosa vista eran disfrutados durante los paseos matinales y vespertinos que acostumbraba realizar Maximiliano por lo que decide incluir en la lista de los sitios imperiales el Palacio de Cortés y el Jardín Borda.

En sus recorridos cotidianos, conoce el poblado de Acapantzingo, se dice que el terreno del ahora Hotel Misión fue testigo de sus largas caminatas, donde disfrutaba de la belleza y tranquilidad del lugar con escasas viviendas rodeadas de extensas huertas, árboles frutales y cafetos.

Encantado con el componente étnico, Maximiliano decide comprar una propiedad a familias indígenas, ordenando la construcción de una residencia de descanso que incluiría un chalet tipo francés.

El comité ejecutivo del hotel, encabezado por José Manuel Oviedo Arce, recibieron a los invitados y los llevaron a conocer las áreas remodeladas del hotel, ellos son: Marina Vargas, coordinadora de calidad; Luis Hernández, contralor;  Alejandra Rivas, relaciones públicas; Gloria Hernández, gerente de ventas, Oscar Zavala, gerente de mantenimiento.

El hotel cuenta con dos albercas, estacionamiento  y un Spa donde se realizan experiencias para curar el alma, el cuerpo y el espíritu. Hay masajes, rituales de relajación y purificación, faciales, y tratamientos corporales.

Dentro de la celebración se presentó Sonidos de mi Tierra, un extraordinario grupo de músicos dirigidos por el maestro pianista Sergio Mondragón acompañado de Erik Briseño y Zury Alonso, cantantes profesionales que interpretaron canciones de varios estados de la República Mexicana acompañados de las bailarinas, Diana Cuevas y Gabriela Venegas, vestidas con los maravillosos y coloridos trajes típicos del país.