- Protestan contra el líder de SUCHAA, Eliezer Argüelles
José A. Miranda
Yolanda Delfina Méndez Aguilar exige que se le respete el amparo federal que le permite trabajar con sus unidades de transporte público.
Chetumal.- Yolanda Delfina Méndez Aguilar, la mujer taxista, con 10 años de antigüedad como socia propietaria del Sindicato Único de Choferes de Automóviles de Alquilar ( SUCHAA) de esta ciudad, quien en afán de justicia se crucificó en un madero el lunes pasado frente al Palacio de Gobierno, continúa en huelga de hambre, junto con los 7 choferes de igual número de combis que son de su propiedad, entre ellos 2 mujeres, todos acompañados con sus hijos, culpando al líder sindical Eliézer Arguelles Borges, por no permitir levantar ni traer pasaje de la ruta Chetumal-Felipe Carrillo Puerto.
Méndez Aguilar, quien el jueves realizó una marcha por la avenida principal de los Héroes, junto con sus empelados y familias, acompañados de sus propios hijos, señaló su desesperación por la falta de justicia por parte de las autoridades, toda vez que mediando un amparo federal, a Eliézer Arguelles no le incomoda, la sacó a golpes el sábado de las instalaciones del sitio aledaño a la terminal de autobuses de esta ciudad, personalmente la esperó acompañado de la directiva sindical, con 5 patrullas del Suchaa, le cerró el paso en 3 ocasiones en plena calle, y a pesar de que se le habló a la policía y que le hicieron saber al líder que había el amparo federal, impidió la circulación de las combis disponiendo que bajaran todos los usuarios, sucediendo lo mismo de Felipe Carrillo Puerto hacia Chetumal.
“Este señor no respeta las disposiciones federales y eso es un delito. Nosotros no nos vamos a mover de aquí hasta llegar a las últimas consecuencias. El líder que tenemos trabaja sólo para él, ahora tiene el problema de haberles cobrado 5 mil pesos a 400 nuevos socios, a quienes prometió placas de taxi, teniendo que devolver el dinero al resto de los 93 que sí fueron aceptados ante la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, dejando afuera a los demás.
“Nosotros vamos a ver cómo nos paga los salarios caídos de los 7 choferes de las combis, es mi legítimo patrimonio, no se vale que no dejen trabajar a una mujer que tiene empleados con familia, a quienes les toca sueldo de las ganancias de alrededor de 1 mil 800 pesos diarios por cada unidad, es imposible que se permita tanta impunidad de este pésimo líder, que a toda costa pretende hacerse rico a espaldas de los taxistas de Chetumal.
