• La Secretaría de Seguridad Pública, en sus rondines, no encuentra nada extraño

Juan Ojeda

Existen decenas de caminos en los cuales las personas que los conocen los utilizan para el transporte de mercancía, maderas y drogas.

José María Morelos.- La tala inmoderada de maderas preciosas, el tráfico de drogas y mercancía de procedencia ilícita en las zonas limítrofes de Yucatán y Campeche, es un tema que las autoridades municipales y estatales no  pueden detener, ya que  los mismos campesinos de las rutas son cómplices y prefieren no meterse en problemas.

Esta situación se ha presentado durante varios años ya que el municipio colinda directamente con partes de Yucatán y Campeche, en toda la zona fronteriza cercana a varias comunidades de ambos lados, existen decenas de caminos en los cuales las personas que se dedican a ilícitas actividades conocen y son utilizados para el transporte de mercancía, maderas y drogas.

El director de Seguridad Pública de José María Morelos,  Luis Javier Noh Canché, dijo que efectivamente este tipo de actividades se conocen en las comunidades cercanas a Yucatán y Campeche, no obstante, los campesinos señalan que son solo “rumores” pero nadie decide denunciar por temor, y prefieren quedar callados para no meterse en problemas.

El jefe policiaco aseguró que aún con la falta de elementos y parque vehicular, la corporación realiza los rondines de vigilancia en todas las rutas, y así como han hecho decomisos, como mercancía ilegal, contrabando de maderas incluso drogas, por ser zonas apartadas es difícil establecerse para frenar esta ilícita actividad.

Las rutas son por Puerto Arturo y X-Querol, durante años los campesinos del rumbo han manifestado que esas rutas son utilizadas por personas que trafican maderas, drogas y mercancía, aunque se sabe que deciden no denunciar ante las autoridades por temor a represalias.