• Al amanecer empieza el martirio,  ya que al arreciar el aire todo el polvo entra a las casas de las personas

Alejandro Valdez Caamal

Los habitantes de la colonia Jesús Martínez Ross demandaron que se pavimenten las calles.

Felipe Carrillo Puerto.- Lo que sería de beneficio para los habitantes de las colonias de la cabecera municipal de Felipe Carrillo Puerto, se ha convertido en verdadero martirio y constante motivo de enfermedades respiratorias y gastrointestinales, debido a la fuertes polvaredas que se levantan durante el día en las calles que se abrieron para tener un mejor acceso a las zonas más alejadas.

Con varias calles que se abrieron en diferentes colonias de esta cabecera municipal, los accesos ya pueden ser prácticos para los habitantes, al igual de un sinnúmero de automotores y los taxistas ya pueden dejar su pasaje más cerca del domicilio del pasajero, ayudando a los estudiantes abordar el carro de alquiler y llegar a su centros educativos más rápido, pero los más perjudicados son los adultos de la tercera edad que con trabajo pueden caminar por la edad avanzada que portan.

Un ama de casa de nombre María Poot Dzib, vecina de la colonia Jesús Martínez Roos comentó que lo que hizo el gobierno es bueno porque ahora puede llegar el taxi, el agua purificada, el gas y es más rápido llegar a la tienda.

Sin embargo, dijo que cuando amanece empieza el martirio, al arreciar el aire y todo el polvo entra a mi casa, mi ropa que dejo en el tendero después de lavar queda blanca de tanto polvo que levanta el viento y los taxis que pasan muy fuerte.

Los habitantes del lugar demandaron que se pavimenten las calles para que deje de ser un martirio para los habitantes del lugar o que se busquen soluciones alternas ya que las consecuencias podrían ser más graves principalmente entre los niños y ancianos.