• En su descargo, a “Lito” no le interesa afectar a la familia, pues constantemente salen a corregir los errores de éste

Carlos Calzado C.

Aurelio Joaquín González cada vez se ve con menos capital político. Ni hablar, el cheque de aceptación de “Lito”, está agotado.

Cozumel.- Al presidente municipal de Cozumel, Aurelio Joaquín González, le sucedió lo que a las estrellas fugases, brillan por un momento pero luego se apagan estrepitosamente para no “resucitar” jamás.

En la legislatura pasada, de la que fue presidente de la Comisión de Turismo y se dedicaba a viajar a costa del Congreso, pintaba como un joven político de altos vuelos.

Su liderazgo en la escena legislativa era indiscutible. ¿Qué le pasó al político miembro de la dinastía Joaquín?

Según “Lito”, él no es político sino empresario y que prácticamente lo obligaron sus familiares y amigos a postularse como diputado y luego como presidente municipal, así que a él no le importa su futuro en estas lides y por ello no ha cumplido con las promesas de campaña, en detrimento de los que se dedican a la política dentro del PRI.

Sus debilidades personales, entre el mito y la realidad, y su inoperante desempeño al frente de la administración municipal denunciados por los propios trabajadores, socavaron de manera inclemente su otrora imagen de político eficiente, como los cuentos de hadas, convirtiendo al príncipe en un sapo.

En su descargo, a “Lito” no le interesa afectar a la familia, pues constantemente están saliendo a corregir los errores que éste comete.

En una de esas correcciones de errores, don Manuel Joaquín tuvo que entrar al quite entregando unos terrenos en la playa como garantía, pues su hijo Aurelio Joaquín González adquirió una deuda de 50 millones de pesos con empresarios locales, a quienes no les ha pagado desde hace 3 años y por la presión de estos inversionistas “Lito” ha tenido que ser atendido de sus constantes depresiones.

Lo cierto es que Aurelio Joaquín González cada vez se ve con menos capital político. Ni hablar, el cheque de aceptación de “Lito” Joaquín está agotado, y por su mala administración los cozumeleños podrían dar un voto de castigo reprobando al empresario que tienen como presidente municipal.