Derecho de réplica

José Luis Montañez

 

• Capacitarán a personal de gobiernos locales sobre peritajes

 

 

El titular de la Fiscalía General del Estado (FGE), Óscar Montes de Oca Rosales, informó que entre sus tareas pendientes en la Décima Agencia del Ministerio Público del Fuero Común, está incrementar el personal en la Policía de Investigación y reducir el rezago en las carpetas de iinvestigación.

Y aunque ya habían solicitado al Congreso del estado aumentar el presupuesto para la dependencia, no se autorizó en su momento, de tal manera que, sin aclarar montos específicos, sí adelantó que pedirán de nuevo los recursos a la nueva legislatura.

Sobre los logros de la FGE, Montes de Oca subrayó: “Cuando llegue en diciembre de 2018 nos encontramos con una institución completamente destruida, desorganizada y sin capacitación, pero que hoy ya hay mejores condiciones”.

Y comentó que se va a colaborar con los gobiernos municipales, para capacitar al personal como peritos y que puedan intervenir en los procesos penales de la FGE, situación que está considerada en la ley.

Sin presupuesto para mantenimiento de agencia del MP

En cuanto a la posibilidad de designar un presupuesto para el mantenimiento de las instalaciones de la décima agencia del Ministerio Público del Fuero Común, dijo que por el momento no hay presupuesto, ya que estado atraviesa por una situación financiera difícil y que se tienen otras prioridades. De modo que, por el momento no se considera ni siquiera mantenimiento.

Del aumento en el número de integrantes de la Policía de Investigación para los próximos meses, fijo que es facultad del Congreso estatal, pero sí lo consideró necesario, ya que en la actualidad sólo se conforma de ocho personas.

Aclaró también que tendrá continuidad en su puesto, pues su periodo concluye hasta el 2027, “me he reunido con representantes del próximo gobierno estatal y mantenemos una excelente relación” aseguró.

Finalmente, celebró que aunque se lograron avances importantes hasta ahora, aún quedan muchas cosas por hacer. “Recibimos la dependencia en ruinas, con ausencia de protocolos, modelos de actuación, de procedimientos, norma interna, con retrasos en tecnología, incluso, con personal que se negaba a trabajar o en contra de la política interna, pero hemos logrado mejorar mucho”, concluyó.

Aeropuerto de Tulum tendría un impacto
devastador igual al del Tren Maya

A decir de varios expertos en la materia, el Aeropuerto de Tulum provocaría una crisis en el ecosistema ambiental de ese municipio a corto o largo plazo, según diversos factores, y es que, al igual que el Tren Maya, se trata de un megaproyecto que costará al medioambiente más de un millón de árboles perdidos y cuyo plan de reforestación aún no ha sido dado a conocer.

Un reportaje denominado “Aeropuerto de Tulum: la nueva devastación del Ejército”, presentado en Latinus, se trata de una investigación donde se denuncia al gobierno federal de conocer los riesgos ambientales del aeropuerto y aun así continuar con las obras sin importar la devastación forestal.

Del mismo modo, se acusa al gobierno federal de rematar el metro cuadrado de los 604 ejidatarios de Chunyaxché en Quintana Roo, a quienes presuntamente habrían presionado para ceder sus propiedades para efecto de esta obra.

La investigación expone que la construcción de esta terminal aérea supone que se van a talar al menos un millón 300 mil árboles de 62 especies diferentes que conviven en el ecosistema, lo que representa una devastación para la biodiversidad de la región que alberga a 541 especies de fauna silvestre, entre monos, tucanes y jaguares, que serían desplazados.

El gobierno federal argumenta, que este aeropuerto va a impulsar el turismo de la región dando un acceso más rápido a las visitas nacionales e internacionales a la zona de la Riviera Maya, pero, es aquí donde resalta la pregunta ¿a qué costo? ¿realmente valdrá la pena poner en riesgo la riqueza natural del país? Esas son cuestiones que el propio gobierno parece haberse respondido, pues no planean dar marcha atrás.

Y es que, a decir de la investigación de Latinus, el gobierno federal ya conocía los riesgos ambientales ocasionados por la construcción del Aeropuerto de Tulum, pues fueron expuestos en el documento técnico unificado realizado por el Instituto de Ingeniería de la UNAM a solicitud de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), pero continuaron con las obras.

Ese documento, según indicaron, expone 43 impactos identificados, siendo 38 adversos contra cinco benéficos. Asimismo, destacaron “36 impactos capaces de generar cambios que pueden afectar las funciones de los factores a corto, mediano y largo plazo”, lo que habla de un peligro verdadero e irreparable para la región y su riqueza natural.

Obras muy cercanas a Sian Ka’an

El documento expuesto en el reportaje advierte que la permeabilidad de la región es inestable pues contiene cuevas subterráneas, de tal manera que emiten una recomendación especial para tener un cuidado en el manejo de los residuos de la construcción, pues muy fácilmente se puede provocar contaminación de la región, mientras que la inestabilidad en el suelo, también puede ser un factor de riesgo que debe ser tomado en cuenta con bastante seriedad.

Por otro lado, señalan que el Aeropuerto Internacional de Tulum se encuentra bastante cerca de los límites la reserva de biosfera de Sian Ka’an, es decir, específicamente a un kilómetro de lo que es considerado un patrimonio intangible de la humanidad por la Unesco, al ser un humedal de talla internacional y que alberga muchísimas especies en peligro de extinción, que por su categorización deben ser preservadas a toda costa.

El documento y especialistas, afirman que el impacto resultará devastador porque con la llegada del Aeropuerto a esa región comenzará un el crecimiento urbano de la región que sea de forma organizada o desorganizada, agravará los daños al medio ambiente.

Y es que, se espera que la construcción del Aeropuerto Internacional de Tulum vendrá acompañada, además de otras obras como la de un centro comercial, hoteles y otros comercios que buscan potenciar el turismo de la región, pero una vez más ¿a qué precio?

Que ejidatarios fueron estafados

Por otro lado, se dio a conocer que los ejidatarios de Chunyaxché, quienes vendieron sus tierras para la construcción de este proyecto, han sido presuntamente estafados, pues aseguran que el gobierno federal los convenció de vender en 40 pesos el metro cuadrado, lo cual es por mucho, un precio inferior al costo real de sus propiedades.

Se presume que 604 ejidatarios, recibieron poco más de 700 mil pesos por sus terrenos; no obstante, una vez que se enteraron que las empresas de bienes raíces, ahora comercializan estas tierras con un valor de más de mil pesos por metro cuadrado, se sintieron engañados y salieron a manifestar su reclamo.

Entrevistados por Latinus, los ejidatarios aseguran que se trató de un engaño por parte de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, aunque, son conscientes de que difícilmente se podrá hacer algo al respecto. “Ya no hay nada que hacer, ya todo está vendido”, dijo uno de los afectados.

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