Apoteósico recibimiento al campeón

• Miles de aficionados acamparon desde un día antes para ver a sus ídolos

Miles de aficionados argentinos acamparon desde un día antes para recibir a sus ídolos con carteles de agradecimiento y lágrimas en los ojos.

A las tres de la madrugada de este martes, los campeones mundiales de futbol llegaron al aeropuerto de Ezeiza, en Argentina, en un vuelo que acabó tardando más de lo esperado con una parada en Italia a medio camino.

El primero en bajar fue un Leo Messi exultante de felicidad con la Copa en la mano escoltado de otra de las figuras estrella, el entrenador de la selección Scaloni. Tras ellos, el resto del equipo con expresiones de cansancio, pero sobre todo de alegría.

De fondo sonaba la Mosca, quién se trasladó al aeropuerto para tocar en vivo la canción ícono del mundial que no hay argentino en todo el país que no sé sepa de memoria “Muchachos, nos volvimos a ilusionar”.

Desde el aeropuerto, los jugadores se dirigieron a un Predio de la AFA colmado de argentinos que llevaban desde la mañana acampando para recibir a sus ídolos con carteles agradeciendo al equipo y lágrimas en los ojos.

Las imágenes dejaron sin habla: Una marabunta de miles de personas enloquecidas ante la llegada de Messi y el resto del equipo. A pesar de que fueran más de las tres de la mañana y en Ezeiza, a una hora aproximadamente del centro de la ciudad. La euforia de un pueblo feliz como nunca por recibir a sus héroes nacionales y que sufrió como nunca durante este mes, ya que recordemos que la Argentina comenzó perdiendo el primer partido del mundial ante Arabia Saudita.

La locura fue total con masas enloquecidas gritando al ver a sus ídolos saludar a los lejos y decenas de niños subidos a hombros de sus padres para poder presenciar un recuerdo que nunca en su vida olvidarán.

Los principales canales de televisión del país hicieron retransmisiones durante toda la noche para ir contando cada detalle de la llegada del equipo con la Copa al país, imagen que se esperaba desde hace 36 años.

Así se pudo ver un primer acercamiento de lo que se espera sean las celebraciones masivas de mañana en un Obelisco que, ya en la madrugada, estaba lleno de gente haciendo noche para recibir a los jugadores al día siguiente.

Otra muestra más de la euforia de un país que, desde el partido final, no duerme. Y es que las emociones siguen a flor de piel y todos quieren agradecer a los jugadores por una alegría que muchos clasifican como «nunca antes vista».

Las celebraciones de la selección se creen que duplicarán en cantidad de personas a las de la final del mundial. Las primeras estimaciones hablan de casi dos millones de personas que colmarán la 9 de julio, principal arteria de la capital.

Hubo argentinos de todas partes del país, ya que uno de los objetivos de decretar feriado nacional es que la gente de provincias pueda viajar a Buenos Aires a recibir a los jugadores en un día histórico para el país.

La idea es que “La Scaloneta” parta en una caravana desde el predio de la AFA al mediodía para recorrer la capital hasta acabar en el Obelisco. Ya confirmaron que no irán a la Casa Rosada, como sí hizo por ejemplo Maradona en el pasado, porque no quieren politizar los festejos.

Y es que estos días los argentinos están más unidos que nunca. Todos se abrazan y cantan juntos sin importar la grieta política entre peronistas y antiperonistas o de clubes como Boca y River. Todo es felicidad y armonía para un pueblo que, hoy más que nunca, se siente orgulloso de ser argentino.