Mensajes ofensivos, lo más común

• El estado es cuarto lugar a nivel nacional

El acoso cibernético en Quintana Roo aumentó aproximadamente un 6%, según encuesta del Inegi.

El ciberacoso es el acoso que tiene lugar en dispositivos digitales, como teléfonos celulares, computadoras y tabletas. Puede ocurrir mediante mensajes de texto, textos y aplicaciones, o bien por Internet en las redes sociales, foros o juegos donde las personas pueden ver, participar o compartir contenido.

En este caso implica la publicación o el envío de mensajes electrónicos, incluidas imágenes o videos, con el objetivo de acosar, amenazar o atacar a otra persona, situaciones que han ido en aumento en Quintana Roo, según datos del Inegi.

Y es que, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, el acoso cibernético en Quintana Roo aumentó aproximadamente un 6% en comparación con 2022, cuando era del 18.7%.

Detallaron que, durante el 2023, el 24.5% de los usuarios de internet en Quintana Roo informaron haber sufrido acoso cibernético, situando al estado en el cuarto lugar nacional, detrás de Durango (28.8%), Oaxaca (25.5%) y Puebla (25%).

Asimismo, refieren que el 26.1% de los hombres usuarios de internet en el estado reportaron acoso, en contraste con el 22.8% de las mujeres, es decir, que por difícil que parezca, los hombres suelen ser víctimas de este delito con mayor frecuencia.

En este caso, la principal forma de acoso fueron los mensajes ofensivos en WhatsApp. Al identificar el sexo del agresor, el 65% de los hombres y el 55.6% de las mujeres identificaron a sus agresores como hombres, lo que significa que también son los varones los que ejercen este tipo de violencia con mayor frecuencia.

El acoso cibernético se presentó entre personas de 12 a 29 años con escolaridad básica en su mayoría, siendo las identidades falsas y los mensajes ofensivos las situaciones más comunes. Cabe destacar que únicamente el 17.2% de las víctimas tenían conocimiento de quienes eran sus agresores, en ese caso fueron las críticas por apariencia o clase social, las formas más comunes de acoso.

Finalmente, sobre las medidas de seguridad, indicaron que el 95% de los usuarios en Quintana Roo creó o puso contraseñas, y sólo el 21.6% instaló o actualizó programas antivirus, cortafuegos o anti espías.

Quintana Roo tiene un alto nivel de ciberacoso, pero solo el 6.4% de la población usuaria reportó haber sido víctima de ciberdelitos, por debajo de la media nacional que es de 6.6%.