• Operativo en Culiacán para revisar armas

Elementos de la Sedena y de la PGR desplegaron un operativo en las instalaciones de la Policía Ministerial en Culiacán.

Para investigar hasta qué grado se vincularon los policías estatales de Sinaloa con quienes emboscaron a elementos del Ejército, un grupo de elementos de la Sedena y de la PGR desplegó un operativo en las instalaciones de la Policía Ministerial en Culiacán y tomó declaración a varios agentes que concurrieron al incidente, al tiempo que otro grupo revisó escrupulosamente las armas de cargo de la corporación.

Ello, porque existe una línea de investigación en la que debe explicarse el porqué los policías locales llegaron al lugar del ataque 13 minutos después de que los militares reportaron lo que ocurría al Centro de Emergencias y Respuesta Inmediata de Sinaloa.

Además, los que llegaron sólo se limitaron a acordonar el área, con el fin de conservar evidencias periciales y no procedieron a perseguir a los agresores.

La Procuraduría de Sinaloa confirmó que fundamentalmente el operativo de la Sedena fue para revisar el rayado de las armas que utiliza la corporación y que la información que el operativo se propuso obtener quedó satisfecha, que la misión concluyó sin ningún contratiempo.

Otras de las revisiones que se hicieron con la Policía del auxilio que pidieron los militares emboscados.olver a escuchar la grabacilas armas que utiliza la corporacias entidades y a Ministerial es la forma cómo opera su sistema de telecomunicaciones y si es posible volver a escuchar la grabación del auxilio que pidieron los militares emboscados.

El 30 de septiembre, un convoy militar fue atacado por un comando, cuando escoltaban una ambulancia de la Cruz Roja que trasladaba a Julio Óscar Ortiz Vega, ‘El Kevin’, quien resultó herido previamente en un enfrentamiento en el municipio de Badiraguato.

El general Alfredo Duarte Mujica informó después que el comando que atacó y asesinó a cinco militares, presumiblemente estaba a las órdenes de los hijos de ‘El Chapo’ Guzmán; al día siguiente, José Refugio Rodríguez, abogado del capo, afirmó que Iván Archivaldo y Jesús Alfredo no tienen relación con el ataque a los militares y piden una investigación “efectiva e imparcial para que se esclarezcan los hechos”.

El lunes, a 10 días del ataque, el abogado se presentó en las instalaciones de la PGR para reiterar que los hijos del capo no participaron en la emboscada.