Derecho de réplica

José Luis Montañez

 

• Desde pequeños negocios hasta grandes hoteles son amenazados

 

 

El paraíso del turismo nacional se ha convertido en un paraíso para el crimen organizado tan gradualmente que hoy se sufren las consecuencias, ya que todo tipo de comercios en Cancún y la Riviera Maya deben pagar el “cobro de piso”, víctimas de los extorsionadores que ya les da igual atentar contra grandes, medianas o pequeñas empresas, que ya de por si enfrentan un panorama muy difícil a razón de la crisis económica derivada de la contingencia sanitaria por la Covid-19.

En este contexto, el Caribe mexicano es blanco de extorsionadores, que según los empresarios, han venido a multiplicarse ante la poca labor por parte de las autoridades, tan es así que este tipo de delitos han alcanzado a todas las actividades económicas, que van desde muy pequeños negocios hasta complejos hoteleros, es decir, ya nadie se salva.

Una investigación realizada por México Evalúa, revela que las empresas, comercios de todos los giros y hasta los empleados de Cancún, Riviera Maya y Tulum, son atacados por parte del crimen organizado, pues el “cobro de piso” de ha convertido en un “impuesto” más a pagar para mantenerse activos y seguros, y que, afirman, sólo con voluntad política se podría erradicar, ya que denuncian que hasta ahora no se han llevado a cabo acciones contundentes.

El coordinador del Programa de Seguridad y Reducción de la Violencia en México Evalúa, Romain Le Cour, declaró que trabajaron con México SOS, con el objetivo de conocer el tema de las extorsiones y como afecta sobre todo en Playa del Carmen, donde se tiene identificado el mayor número de casos contra los negocios locales.

Para efecto de lo anterior, se organizaron mesas de trabajo en las que se amplió el panorama de este tipo de delitos en México y de esta manera llamar la atención de las autoridades, pues este delito ya que está afectando la vida en la comunidad, así como el potencial económico, que está gravemente afectado en al entidad.

Empresarios tienen miedo de denunciar

El coordinador de México SOS en la entidad, James Tobin Cunningham, explicó que de acuerdo con el trabajo se identificó que al menos en Playa del Carmen en un radio de 700 negocios en la llamada Quinta Avenida, al menos se deben pagar 20 mil pesos mensuales hasta los 160 mil pesos y que son pocos los que se animan a denunciar, por el miedo de que los delincuentes cumplan con sus amenazas y atenten físicamente contra sus familiares y empleados.

Comentó en este marco: “Lo que sí se tiene es miedo, y esto lleva a que una persona tenga el valor de hacer una denuncia, sin embargo esto de no realizarse es más difícil combatirlo. Tenemos unas cifras al menos en Cancún de 17 denuncias de extorsión, lo que significa una cifra baja, y que al menos 99% de los casos no llegan a una denuncia”.

En ese mismo sentido, informaron que Quintana Roo registró casos de extorsión en las obras de infraestructura, en la que además los empleados tenían que dar un pago de “derecho de piso”, es decir, para que los dejara trabajar libremente y además de eso, eran obligados a vender droga, pues de lo contrario eran golpeados y muchos de ellos hasta desaparecidos.

Inicialmente, este fue un fenómeno que se detectó en Cancún, pero en la actualidad, lamentablemente ya se dieron casos también en Playa del Carmen y Tulum, donde los empleados acusan que son obligados a pagar una especie de cuota a fin de que los dejen trabajar sin ser molestados, bajo la amenaza de que tienen identificadas a sus familias podrían atentar contra sus vidas.

Ya se conoce sobre la situación y se convive con quienes cobran, lo cual es preocupante, pues incluso por parte de la Confederación Patronal de la República Mexicana, se instaló una mesa de denuncia, para que todos los afectados acudan en busca de ayuda, sin embargo, en la mayoría de los casos, no denuncian ni acuden a este tipo de mesas por el temor a los delincuentes.

Para la organización México Evalúa, la extorsión empresarial se puede detener con un trabajo en el que las autoridades pongan más empeño, iniciando por acabar con la corrupción policial, el diseño de protocolos para evitar ser víctimas y mejorar los patrullajes en zonas. Lo mismo demandan seguridad para que los trabajadores y empresarios afectados puedan animarse a realizar las respectivas denuncias sin el temor de ser asesinados.

Quintana Roo, segundo lugar nacional en extorsiones, en 2020

De acuerdo con información del Observatorio de Seguridad y Género de Quintana Roo (OSEGE), en 2020, el estado fue el segundo con mayor número de carpetas de investigación sobre extorsión por cada 100 mil habitantes.

Durante el primer semestre de 2021, de acuerdo con la misma institución, los casos se han reducido un 62%, sin embargo, los datos de la Secretaría de Seguridad Pública del estado dicen que las llamadas al 911 relacionadas con este delito en el mismo periodo aumentaron un 49%. De acuerdo con sus estadísticas, entre un 8% y un 12% de las víctimas decidieron hacer el pago exigido y la mayoría se concentran en Cancún y en Playa del Carmen.

James Tobin, integrante del Consejo Nacional de Seguridad Pública (CNSP), explicó: “extorsionan de chile, de mole y de manteca. Lo mismo cobran cuotas al Spiderman o al Batman que animan afuera de los antros, que a los restauranteros y hoteleros. Van de 200 pesos al día, al He Man o al Hombre Araña; 25, 50 o 100 mil pesos a los negocios. Imagínate con 10 negocios de estos, se llevan millón de pesos mensuales en promedio”.

Recalcaron que en Playa del Carmen, operan siete mil negocios y de acuerdo con los propietarios, el problema es más agudo en la Quinta Avenida de Playa del Carmen, un corredor turístico de 4.5 kilómetros, en donde se concentran más de 700 establecimientos comerciales entre restaurantes, joyerías, tiendas de artesanías, plazas, boutiques, galerías, casas de cambio, zapaterías y perfumerías. Antes de la pandemia, transitaban por ese corredor 12 mil personas al día, el 80%, turistas.

De acuerdo con Jobin, nadie escapa a la extorsión. “Los concesionarios de zona federal marítimo terrestre, los spas, los bares y el señor del puesto de tacos. En la Quinta tenemos ambulantes, te ofrecen droga, niñas, niños… ¿que somos, ciegos o qué? ¿Por qué no se toman cartas en el asunto? Esta gente de plano te canta ‘si tú te quieres poner aquí, me vas a pagar tanto y además tienes que vender esto y lo otro”, denunció.

Por su parte, Lucio Hernández dice que, por ejemplo, la constructora encargada de las obras del hotel Nickelodeon, inaugurado en la Riviera Maya bajo un concepto inspirado en personajes de caricatura como las Tortugas Ninja, Bob Esponja y Dora la exploradora, fue víctima de extorsión, lo mismo que los más de mil trabajadores de la obra. Incluso, uno de los socios del resort fue extorsionado.

De acuerdo con una investigación periodística publicada el pasado 27 de marzo por Connectas, en alianza con varios medios mexicanos, como El Universal, el esquema extorsivo aplicado a los obreros consiste en exigirles cuotas semanales e incluye el reclutamiento forzado para la venta de droga, la vigilancia o hasta el sicariato.

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