- Le emociona formar parte del elenco de El Tenorio del Blanquita
Sergio Aquino
Con el corazón palpitando a mil por hora, pero con una enorme sonrisa en la boca, la guapa Martha Julia se confiesa lista para dar vida a Doña Inés en el divertido montaje El Tenorio del Blanquita, que este jueves inicia temporada en la capital del país.
“Estoy con los nervios a todo lo que dan y súper emocionada porque estar en el Blanquita es una experiencia muy bonita, ya había estado aquí con El premio mayor, que fue mi primera telenovela, y regresar a este escenario después de tantos años y acompañada de todo este elenco tan importante, con tanta trayectoria, pues para mí es una bendición”, aseguró la actriz en entrevista para Diario Imagen.
Decidida a disfrutar de esta experiencia, Martha Julia se sumó inmediatamente al proyecto sin importar que tendrá que trabajar doble para cumplir sus compromisos en la telenovela Corona de lágrimas.
“Cumplo uno más de mis sueños que era hacer una Doña Inés y aunque fue medio apresurada la invitación, tenía tantas ganas de hacerlo que le entré con todo y telenovela y el negocio que acabo de abrir; me aprendí lo que tenía que aprender en tres días y afortunadamente he estado apoyada por estos grandes comediantes, sobre todo Maribel Fernández La Pelangocha, que me ha consentido y me ayuda a tener más confianza”, dijo.
En el montaje, la artista alternará funciones con Lorena Herrera y compartirá créditos con experimentados maestros del humor como lo son Alejandro Suárez, Alfonso Zayas, Raúl Padilla Chóforo, Alfredo El Pelón Solares y Arturo Peniche.
Uno de sus mayores deseos con esta nueva aventura, según comentó, es salir de gira y conocer de cerca al público de todo el país, sobre todo de su ciudad natal; “me encantaría ir a mi tierra, Culiacán, jamás he pisado un teatro por allá y sería muy bonito hacerlo”, aseguró.
Finalmente, tomando como referencia el papel de la exitosa pero solitaria Flor Escutia que realiza en la pantalla chica, Martha Julia envió un mensaje a las mujeres mexicanas: “que se pongan veinte espejos alrededor y se den cuenta de todo lo bueno que tienen, lo que la vida les ofrece y que hay cosas maravillosas como para estar perdiendo el tiempo en relaciones difíciles”, concluyó.