Sector turístico demandante

• Padecen estrés y ansiedad por condiciones laborales exigentes, señalan expertos

La salud mental en Quintana Roo se deteriorado debido al creciente estrés y ansiedad entre sus habitantes.

Chetumal.— La salud mental en Quintana Roo se deteriorado debido al creciente estrés y ansiedad entre sus habitantes. Este problema se ha intensificado en los últimos años, afectando especialmente a los trabajadores de la industria turística, quienes enfrentan largas jornadas laborales y condiciones de trabajo exigentes.

Los empleados en la industria turística de Quintana Roo, que incluye destinos como Cancún y Playa del Carmen, a menudo trabajan largas horas sin descansos adecuados. Esta situación genera altos niveles de estrés y ansiedad, afectando su bienestar general.

Asimismo, la pandemia por Covid-19 exacerbó los problemas de salud mental, con un aumento significativo en los casos de depresión, ansiedad y otros trastornos mentales. La incertidumbre económica y la preocupación por la salud personal y familiar también han contribuido a este incremento.

En conferencia de prensa, los presidentes de la Red de Profesionales en Psicología de Quintana Roo, Asociación de Psiquiatría de Quintana Roo, Colegio de Psicólogos de Quintana Roo, Asociación Pro Salud Mental de la Riviera Maya y Fundación, destacaron que en México aumentaron trastornos como la ansiedad, depresión, autolesiones, trastornos graves como la esquizofrenia, trastorno bipolar, así como consumo de sustancias.  Asimismo, porque muchos trabajadores viven en condiciones precarias, con acceso limitado a servicios de salud mental. La falta de apoyo y recursos adecuados agrava la situación, dejando a muchos sin el tratamiento necesario.

Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en México, cerca del 15% de la población sufre de trastornos mentales, pero sólo el 2.5% recibe atención adecuada. En Quintana Roo, la situación es aún más crítica debido a la escasez de profesionales de salud mental. La tasa de psiquiatras en el estado es de sólo 1.29 por cada 100,000 habitantes, muy por debajo de la recomendación de la OMS de 5 por cada 100,0001.

Quintana Roo trabaja en la propuesta de capacitar a médicos de primer nivel para detectar problemas mentales no graves, darles la primera atención y de ser necesario, canalizarlos a médicos psiquiatras, lo cual ayudaría a disminuir el gran rezago.

Los días 22 y 23 de noviembre celebrarán el congreso “Turismo y Salud Mental” en las instalaciones de la Asociación de Hoteles de Cancún, Puerto Morelos e Isla Mujeres.

Dos mil jóvenes viven violencia familiar 

 La violencia familiar es un problema persistente en Quintana Roo, afectando a miles de jóvenes cada año. De enero a agosto de 2024, se han registrado más de 4,794 denuncias por violencia familiar en el estado, lo que representa un promedio de 19.64 denuncias diarias. Entre las víctimas, más de 2 mil son jóvenes que enfrentan situaciones de abuso y maltrato en sus propios hogares.

La inestabilidad económica es uno de los principales factores que desencadenan la violencia familiar. Las tensiones financieras pueden llevar a conflictos y agresiones dentro del hogar. Asimismo, los celos y los conflictos personales juegan un papel importante en la violencia familiar. Estos problemas pueden escalar rápidamente, resultando en situaciones de abuso físico y emocional. El consumo de alcohol y drogas es otro factor que contribuye significativamente a la violencia familiar. Estas sustancias pueden alterar el comportamiento y aumentar la probabilidad de actos violentos.

Los jóvenes que sufren violencia familiar a menudo desarrollan problemas de salud mental como depresión, ansiedad y trastorno de estrés postraumático (TEPT). El abuso y el maltrato pueden afectar negativamente el rendimiento escolar de los jóvenes, dificultando su capacidad para concentrarse y aprender.

Además de que, la violencia familiar puede aislar a los jóvenes de sus amigos y compañeros, afectando su capacidad para formar relaciones saludables.