• En el Hospital General de Othón P. Blanco

Los médicos encargados de los tomógrafos computarizados comenzaron a cobrar los servicios disfrazados de propinas.

Chetumal.- Más tardó en que esta capital tenga el servicio de tomografía computarizada, que la corrupción invadiera y se volviera un jugoso negocio para personal de la Secretaría  de Salud.

Luego de varios años que esta ciudad requería con urgencia un área especializada, como la tomografía, como la que hace poco tiempo entró en funciones en el Hospital General, donde el gobierno anterior cumplió una añeja demanda social.

Empero, evitar los traslados a Mérida sí trajo un beneficio económico, pero para los bolsillos del médico encargado de sacar las tomografías y demás personal involucrado, ya que sin obrar recibo alguno y entrando por otras puertas, sin registrarse en recepción, pacientes desfilan para obtener este servicio, que se les proporciona casi al 50%.

Una señora, de 71 años, cuyas iniciales son I.G.G., en su casa recibió a DIARIOIMAGEN, donde señaló que padece de su rodilla y recientemente tuvo una crisis nerviosa, por lo que su doctor de la Clínica Carranza le ordenó hacerse una tomografía y la mandó al Hospital General, donde al averiguar el costo le dijeron que era de 4,500.00.

El ama de casa, al ver que era muy costosa, preguntó si había otras opciones, por lo que la recepcionista le dijo que el doctor recomendaba que se inscribieran al Seguro Popular para que el servicio fuera más barato. Al hacer el trámite regresó y le fue asignada su cita.

Al llegar a la hora fijada 8:30 am, le dijeron que pasara por una puerta alterna e ingresó, el doctor le hizo los estudios y ahí le pidió la cantidad de 2 mil 250 pesos, mismos que la anciana le pagó en efectivo.

El galeno le indicó que esperara un momento y posteriormente le fueron entregadas las placas de acuerdo al padecimiento descrito en  la solicitud hecha por el doctor de la Clínica Carranza, pero extrañamente no le dieron ningún recibo oficial de SESA, ni anotación alguna en el carnet del Seguro Popular, donde se precise el padecimiento y el servicio de la tomografía recibida.

La valiente señora precisó que la corrupción debe acabarse y sobre todo no se debe lucrar con la salud de las personas que necesitan el servicio, por lo que pide a las autoridades investiguen estos hechos, ya que en pláticas con otras personas allegadas a ella, mucha gente ha hecho el pago de las tomografías sin que le extiendan el comprobante o recibo oficial.