• Alcalde electo
• Gana por segunda ocasión, ahora bajo la bandera de Morena

 

 

 

“No soy tan joven como aparento, ni tan viejo como lo soy, lo que hice bien antes, ahora lo haré mejor”: Hernán Pastrana Pastrana.

Chetumaleño de nacimiento, de sangre quintanarroense, heredada por sus padres, a sus setenta años, Hernán Pastrana Pastrana dice no sentirse de los años que tiene y el número de éstos no representa lo en ellos aprendió.

Pastrana Pastrana ganó, el pasado 1 de julio, por segunda ocasión, ahora bajo la bandera de Morena, la presidencia del ayuntamiento de Othón P. Blanco, municipio del que fue el segundo alcalde electo en el periodo 1978-1981, pues en ese entonces triunfó bajo las siglas del PRI.

Pastrana Pastrana se autocataloga como un idealista al que le duelen las condiciones en las que todo el país se encuentra; con tono de voz bajo, transmite calma, seguridad y confianza en sí mismo, habló de cómo realiza el proceso de planeación de los proyectos que pretende ejecutar durante esta segunda vez que ocupará la silla municipal.

¿Cuáles son las diferencias que existen ahora, entre el municipio que gobernó hace 37 años y el que es hoy?

“Los problemas que enfrenta Othón P. Blanco y su cabecera municipal, Chetumal, son muy parecidos a los de hace más de tres décadas, cuando se constituyó con su ayuntamiento, pero, ahora, se ha acumulado el rezago, el avance, en satisfacer las necesidades de los ciudadanos, no se compara con el desarrollo demográfico que tiene la capital del estado y sus poblados cercanos”.

“Estos rezagos acumulados no son enfrentados por instituciones bien engranadas entre sí, por lo que planeamos es realizar esta compaginación entre instituciones para, entonces, hacer un solo frente para dar a la ciudadanía lo que necesita, que no siempre es lo mismo que lo que quieren”.

“Los ciudadanos piden que se dé solución hoy a sus requerimientos, no para mañana; ahí es donde la administración municipal debe tener claro, que cosas requieren una atención inmediata y qué cosas pueden ser para mañana”.

¿Qué es lo que tiene calidad de urgente atender en Othón P. Blanco y Chetumal?

“Para empezar, sus finanzas, las condiciones económicas en las que se partirá, conocer en que esta invertido el dinero, qué proyectos ya están en marcha, si es que los hay. No podemos hacer planes rimbombantes si no existen los recursos para ello”.

“Lo también urgente es, poner un alto a los rezagos en materia de servicios. Alumbrado público, el suministro y calidad de agua, seguridad pública, pavimentación, reparación de los desfondes de las calles en Chetumal, que es ya un problema grave”.

“Ese rezago acumulado fue provocado por el desvío, desperdicio, robo o falta de priorización de los recursos, por lo que es importante lograr una sincronización entre la ciudadanía y sus gobernantes, pues existe escepticismo sobre el actuar de los funcionarios.

“Los ciudadanos se han alejado de su gobierno y, para que los planes funcionen, debe existir una estrecha relación y cooperación entre autoridades y gobernados”.

“El pueblo votó -el pasado 1 de julio- por un “cambio”, pero ¿Qué es lo que se requiere, un cambio de personas o un cambio de actitudes?”.

“Las cosas deben ser diferentes, ahora, el gobierno municipal está obeso de burocracia, es necesario compactar al ayuntamiento, de un tamaño adecuado a sus recursos, para que los dineros se destinen a lo que la población requiere y no a pagar excesivos sueldos, incluso de aviadores, que cobran sin dar un trabajo de provecho a sus empleadores, los ciudadanos”.

¿Cómo tomarán esa dieta municipal de burocracia los chetumaleños, que ven en las instituciones de gobierno como la única fuente de empleo de la zona?

“Así es, ahora existe una enorme diferencia entre la cantidad de fuentes de empleos que se generan en el norte del estado, con toda su exuberancia y belleza y el sur que se adormeció, o lo adormecieron, de manera económica”.

“El campo del sur está abandonado, debería ser una fuente de empleo y recursos importante, pues el consumidor de todo su producto está aquí en el estado. La industria hotelera debe de ser abastecida por el campo del sur del estado, sin embargo, la tierra está abandonada, y las personas migran a la capital del estado en busca de empleo, que no existe”.

“No hay, en Chetumal o el municipio, empresarios suficientes que generen empleos, urge una reactivación de la inversión en el sur del estado”.

¿Qué participación tendrá su administración en la reactivación del campo y le economía del sur, de acuerdo con los planes del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador?

Está en nuestros planes ser promotores y asesores de proyectos productivos, para que, cuando inicie la administración federal de AMLO, no nos encuentren con las manos vacías, que los campesinos y emprendedores tengan ya bien estructurado, de ser necesario con asesoría del ayuntamiento, sus planes de producir la tierra o de abrir un negocio”.

“Se abrió una esperanza para este municipio, en lo económico, cuando, durante su visita a Chetumal, Andrés Manuel anunció su especial interés en generar el desarrollo económico, agropecuario y ganadero de Quintana Roo y promover que los campesinos se organicen y se integren a los proyectos que vendrán de nivel federal, con la diferencia de que ahora, el dinero que se les dé no se perderá en la nada, sino que los proyectos serán vigilados para que el dinero dé frutos y se vean los resultados”.

Ya no habrá “poquiterías” y dádivas a los campesinos, lo que se buscará es que de verdad el campo produzca y exista autosuficiencia alimentaria.

“Antes de iniciar la administración, desde ahora, ya estoy animando a la gente a que busque su desarrollo, que preparen buenos proyectos y que el ayuntamiento los apoyará para que la federación los tome en cuenta, pues, nuestra administración tendrá un área técnica que los guiará”.

“El ayuntamiento dejará de ser una “casita administrativa”, para ser un promotor social, pues hasta ahora, los alcaldes han evadido responsabilidad, alegando que, eso o aquello, no es de su competencia y se lavan las manos ante los gobernados”.

“La ideología de Morena nos marca que, lo que padece o le duele al ciudadano, también lo debe sufrir o dolerle al gobernante, por lo que la figura del alcalde debe cambiar y ser un gestor directo entre el ciudadano y las dependencias estatales y federales, que el munícipe meta las manos donde las tenga que meter para que a los que gobierna tengan lo que necesitan y no mandarlos a la siguiente ventanilla”.

“Será novedoso que, como alcalde, me vaya a tocar puertas, a buscar y gestionar cosas para los ciudadanos de forma personal, ¡nada me cuesta!; si te escondes, le huyes a cosas que no son de tu competencia, si te conviertes en un tecnócrata como munícipe ¿a quién gobiernas?”.

“Yo busco causar una revolución en la forma de gobernar, ser un alcalde que no sea autoritario, prepotente, al que el ciudadano le tenga que hacer caravana, por el contrario, quiero hacer un gobierno amable, comunicativo, que hable con la verdad, así lo hice en mi anterior gestión y lo que hice bien hace 37 años, ahora lo haré mejor”.

“Se puede escuchar pedante de mi parte, pero hasta el día de hoy, la administración que encabecé en 1978-1981 es considerada, por el ciudadano, como la mejor y ¿Qué hice entonces? ¿construí calles de oro? no, sólo traté con la verdad a las personas, la ciudadanía tiene nobleza, por eso, sin dudar, Othón P. Blanco me dio su voto, si hubiera hecho mal las cosas entonces, no estaríamos hablando hoy de los planes de gobierno”.

¿Se ejercerá justicia contra los que han saqueado las arcas municipales? Pues hasta el momento, pese a auditorías y denuncias, la impunidad ha prevalecido y los ex funcionarios siguen libres, pese a que se ha comprobado su responsabilidad en los desvíos de recursos.

“Tenemos que estar conscientes de que a este país lo pudrió la corrupción y que la impunidad se impuso a la sanción, lo que se convirtió en cultura. Se auditará la administración que termina y las anteriores de ser necesario, pues es necesario conocer el estado de las finanzas municipales, de encontrar algún acto que se puede considerar delito, serán las autoridades correspondientes las que realicen las investigaciones y sancione de manera correspondiente a quien provocó el daño”.

¿Qué hay de la necesidad de seguridad en Othón P. Blanco, donde ahora se ven delitos graves y frecuentes que antes no se veían?

“Existe una combinación entre fatalidad y necesidad que ha desencadenado una ola de violencia e inseguridad nunca vista en esta zona del estado. Muchos de los que delinquen lo hacen por falta de oportunidades”.

“En la administración que encabezaré, tenemos ya un proyecto completo para el combate a la delincuencia, que es ambicioso, pero pondrá en marcha muchas cosas con visión de futuro, hay que empezar por la casa, ser honestos”.

¿Habrá reducción de sueldos en su administración como lo dicta la ideología de Andrés Manuel López Obrador?

“No puede -un funcionario- ganar nominalmente dieciséis mil pesos y con su “bono” llegar a ciento noventa, o más de doscientos mil pesos de sueldo, es un insulto”.

“Le he dado vueltas al asunto y digo ¿tu crees que con cincuenta mil pesos al mes no me da?, ¡me sobra!, somos sólo mi esposa y yo; ¡yo no voy a robar! -dice, mientras hace la señal de la cruz en su boca- si no lo hice cuando goberné la primera vez, que era joven y alocado, a mis setenta años sólo quiero servir a los ciudadanos, ya tengo lo que necesito, ¿Qué más puedo ambicionar que ser bien recordado?”.

“A los regidores que ganaban un dineral, también lo voy a compactar, para que ganen lo justo, lo que les dé para vivir de manera decorosa”.

“Ahora, un concejal se echa a la bolsa más de doscientos mil pesos mensuales, más gasolina, más el pago de seis ayudantes, más celular, más boletos de esto y aquello”. “Vamos a irnos por lo justo, todo ese dinero lo vamos a redistribuir entre los que menos ganan, en los amolados de abajo, y en dotar de material para su trabajo, hoy hay trabajadores municipales recolectando basura sin guantes de protección, mientras un regidor despilfarra dinero en viajes y compras”. “Se terminaron las dinastías de los preferidos, y los oportunistas”.

¿Sabrá aprovechar Othón P. Blanco la oportunidad que ofrecerá la puesta en marcha del tren de la ruta maya?

“Es la oportunidad de nuestra “solterona” de “salir”, jajajaja, así le llamo yo a la bahía de Chetumal: “la eterna solterona, a la que nadie quiere violar, ni con un kayak”, es ahora cuando, con la llegada del tren costero a Bacalar, podemos explotar y rescatar lo que tenemos”.

“Existe en Othón P. Blanco una enorme cantidad de sitios arqueológicos, maravillosos, algunos que ya están abiertos al público, que se pueden explotar, pero que ahora, están limitados por una mala, pésima, difusión publicitaria y por una paupérrima infraestructura de caminos de acceso. Si no superamos esas limitantes, literalmente, se nos va el tren con sus turistas a otro lado”.

¿El conflicto limítrofe con Campeche se quedará en otro intento de solución y seguirá siendo bandera de políticos oportunistas?

“Hablé con el presidente electo, Andrés Manuel, sobre ese asunto, de como los habitantes de esa zona sufren, pues una franja de unos 10 mil kilómetros padece de falta de servicios, pues, al ser considerados parte del territorio de Campeche, Quintana Roo se deslinda de su atención y viceversa, ahora si va el tema en serio y nuestro estado y el municipio de Othón P. Blanco recuperará el territorio que le pertenece”.

Hernán Pastrana se despidió al asegurar: ”Yo quería ganar la presidencia municipal, hice todo para ganar, ahora me toca mostrar para qué quería llegar otra vez”.