- Ante lo poco que les presta el Monte de Piedad, prefieren ir a los negocios privados del ramo
Ruth Sansores
El regreso a clases y los gastos de la pasada temporada de verano ahogaron económicamente a los padres, que abarrotan hasta un 50% más las casas de empeño de la ciudad.
Cancún– El regreso a clases en el municipio incrementó hasta en un 50 por ciento la afluencia de pignorantes a las casas de empeño privadas, quienes prefieren operar con este tipo de negocios porque el Monte de Piedad les presta muy poco por sus pertenencias.
Al estar a la vuelta de la esquina el inicio del ciclo escolar 2014-2015 los padres de familia, que ya no son sólo de la clase popular, echan mano de sus joyas o aparatos eléctricos, relojes de marca, para obtener entre 2 mil 500 pesos a 4 mil pesos, cifra que requieren para cubrir los gastos de un estudiante.
Los pignorantes aseguran que el Monte de Piedad, les presta muy poco por sus joyas, pues el oro está barato o simplemente rechazan algunos productos electrónicos por no ser modernos, por eso acuden a las casas de empeño privadas, aunque ofrezcan altos intereses.
Un ejemplo es la afluencia que reciben las casas de empeño particulares como la “Rafael Donde”, que cada año apoya a la economía familiar con estímulos como mochilas y productos escolares básicos, ya que cada padre acude a estos negocios para adquirir adquirir préstamos prendarios para cubrir los gastos de uno de sus hijos.
Otras casas de empeño privadas como Prendalana, Ayuda Oportuna, Rápida y Mejor, entre otras, aseguraron que esta es una de las mejores temporadas que tienen, ya que la población les deja sus prendas porque en otros negocios les quieren prestar cualquier cosa por sus prendas y productos.
