Ahora adoran a los “springbreakers”, antes los odiaban

“Hora 14”

Mauricio Conde Olivares

 

La Riviera Maya, Cancún, Puerto Morelos e Isla Mujeres luchan por tener la mayor tajada del pastel de este segmento de mercado turístico, que comenzó a llegar a esta región del Caribe mexicano.

La Riviera Maya, Cancún, Puerto Morelos e Isla Mujeres luchan por tener la mayor tajada del pastel de este segmento de mercado turístico, que comenzó a llegar a esta región del Caribe mexicano.

 

Luego que por años rehuyeran a los “springbreakers”, ahora la Riviera Maya, Cancún, Puerto Morelos e Isla Mujeres luchan por tener la mayor tajada del pastel de este segmento de mercado turístico, que comenzó a llegar a esta región del Caribe mexicano, ello, ante la caída del peso y para mantener el repunte de las estadísticas históricas de ocupación de cuartos de hotel.

Cancún logró al cierre del 2015 a través de su aeropuerto internacional el visitante número 19 millones e Isla Mujeres registró en el mismo lapso la llegada de más de 2 millones de visitantes, tan sólo para apuntar dos ejemplos del dinamismo de la industria de la hospitalidad que marca un total liderazgo en el país y en el Mar Caribe.

De ahí que dicha industria sin chimeneas en Quintana Roo tiene todo listo para recibir lo que hoteleros y prestadores de servicios consideran una “oleada” de jóvenes estadunidenses y canadienses que vendrán a aportarle nuevos recursos económicos a los agentes productivos locales.

Segmento que no está por demás decirles que en su oportunidad, cuando estos destinos tenían también altas tasas de ocupación, eran rechazados por considerarlos un problema, traducido en riñas, destrozos y alteraciones constantes del orden, derivados de alto consumo de alcohol y drogas.

Las estadísticas marcan el comportamiento al alza de este segmento de mercado, pues en 2010 significó la llegada de 18 mil estudiantes; luego hacia el 2013 fueron 40 mil; 60 mil en 2014; más de 70 mil el año anterior y en este 2016 se espera llegar a los 80 mil estudiantes.

Existe el registro de una derrama económica de 150 dólares diarios por “springbreaker”, toda vez que cada habitación la utilizan cuatro o cinco estudiantes, quienes además contratan tours y entradas a centros nocturnos; además la estadía en promedio es de seis días.

Luego que en unas temporadas no se privilegiaron los servicios turísticos a este segmento, ahora existen diversos paquetes turísticos en su beneficio y hasta negocios especializados que los atraen hacia la región, que son firmas que se comercializan en medios electrónicos canadienses y estadounidenses, que por ejemplo han posicionado reservaciones de una semana todo pagado en Cancún.

Con la temporada de “springbreakers” en marcha desde la última semana de febrero, y durante las próximas cinco semanas, los estudiantes gozarán de los atractivos naturales y las discotecas que caracterizan a Cancún, la Riviera Maya y anexas.

Por lo pronto, ya arribaron los primeros grupos provenientes de Canadá, después llegarán los estudiantes de Estados Unidos, del nivel preparatoria, el llamado High School, para inmediatamente ser alcanzados por sus compañeros de universidad y otras instituciones del nivel superior.

Los prestadores de servicios turísticos locales esperan la mayor afluencias de “springbreakers” entre el diez y el 31 del mes de marzo, aunque los primeros ya comenzaron a llegar en este fin de semana que concluyó.

Adicionalmente, aunque en menor medida, arriban a la región estudiantes del sur del continente, por lo que le fiesta en las playas es una constante de estos destinos turísticos.

Al efecto, suman esfuerzos de seguridad las autoridades de los tres niveles de gobierno con la iniciativa privada, por lo que se refuerza la presencia de elementos policiacos en los litorales, restaurantes, marinas, discotecas y bares, principalmente de la zona hotelera.

De esta forma, las gélidas temperaturas en Estados Unidos y Canadá traen buenas noticias para la industria del hospedaje de Quintana Roo con el arribo de 80 mil “springbreakers”.

A los elementos de la Secretaría de Marina se sumaron los de la Gendarmería Nacional en las playas quintanarroenses, junto con los policías preventivos municipales y los miembros de la llamada Policía Turística, que en conjunto salvaguardan la seguridad de los residentes y visitantes.

Al respecto, la Dirección General de Turismo del Ayuntamiento de Benito Juárez distribuye 5 mil códigos de conducta en los sitios de mayor confluencia de visitantes de Cancún, como es el aeropuerto internacional y los centros de hospedaje.

Dicho código de conducta refiere recomendaciones y recordatorios que debe tomar en cuenta los paseantes, como la existencia del alcoholímetro y la serie de faltas administrativas que pueden recibir.

También permanecen atentos los integrantes del Cuerpo Consular acreditado en Cancún y la Riviera Maya, para atender cualquier incidencia en el actual periodo de vacaciones para los “springbreakers”, en estrecho contacto con la representación diplomática de Estados Unidos y Canadá; pero esto será motivo de posterior análisis en otra entrega de Hora 14.

mauricio_conde@msn.com

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