- Segunda ola de Covid será más dura y mortífera: Macron
Los franceses volverán al confinamiento obligatorio a partir de este viernes y hasta el próximo 1 de diciembre, como mínimo, anunció el presidente, Emmanuel Macron, obligado a recurrir a esta medida ante el rebrote de Covid-19.
“Ni las previsiones más pesimistas habían anticipado que el virus circulara con esta rapidez”, reconoció Macron en un discurso televisado a la nación, en el que advirtió de que esta segunda ola “será más dura y mortífera que la primera”.
El gobierno francés ha decidido la aplicación de este nuevo confinamiento después de consultas con el consejo científico, las fuerzas políticas y los socios europeos y tras constatar que en Francia el número de contagios confirmados se ha duplicado en menos quince días, hasta superar el 1.2 millones de casos.
El total de fallecidos en Francia es de casi 36 mil. Además, advirtió Macron, un 35 % de los pacientes hospitalizados tienen menos de 65 años.
Este nuevo confinamiento será más flexible que el impuesto en marzo: las escuelas permanecerán abiertas, el trabajo continuará en la medida de lo posible y las residencias de ancianos permitirán las visitas, según detalló Macron.
Bares, restaurantes y comercios permanecerán cerrados aunque, en función de la evolución del virus, dentro de quince días se volverá a evaluar esta medida para ver si posible reabrir ciertos comercios, en un período marcado por las compras navideñas.
El nuevo confinamiento nacional con el que Francia quiere frenar el avance de la segunda ola de la pandemia de Covid-19 se aplicará desde la medianoche del jueves.
Vuelta al confinamiento en Europa tira mercados en el mundo
El regreso al confinamiento en las principales economías de Europa derrumbó este miércoles los mercados bursátiles de la región y del otro lado del Atlántico, que cayeron a su peor nivel desde junio, por temores de que las nuevas cuarentenas y cierres de negocios lastren aún más las economías.
Un aumento alarmante de casos de coronavirus en Europa y Estados Unidos está borrando meses de progresos contra la pandemia en dos continentes, lo que ha orillado a nuevas restricciones a los negocios y elevado la posibilidad de nuevos encierros a gran escala y sacudiendo los mercados financieros. Wall Street se contagió del nerviosismo y terminó con fuertes bajas, en un mercado que calibra el impacto de la segunda ola de coronavirus en la economía.